Esta es la razón por la que decidí enviar el correo a la editorial en su día, porque en cuanto leí la sinopsis supe que podría ser un libro que me llegase a gustar y no anduve del todo desencaminada.
Las horas oscuras es una novela que cabalga entre lo histórico, lo épico y el género de misterio. El autor ha sabido introducir un halo de misterio que recorren las páginas del libro, aspecto que hará que muchos lectores se sientan arrastrados a su lectura.
Por lo que respecta al aspecto histórico, el autor nos situará en la Irlanda del siglo X, a donde viajaremos con el monje Brian de Liébana con el objetivo de restaurar un monasterio, el monasterio de San Columbano lugar donde el anterior abad, Patrick O´Brian había comenzado la labor de recopilar manuscritos de toda clase (tanto religiosos como paganos), labor que el monje querrá continuar, para así constituir una gran biblioteca, a la que llamará El espíritu de Casiodoro.El autor nos irá mostrando las costumbres de la época a través de los personajes, así como la relación iglesia-cultura celta arraigada en Irlanda. Dicha relación me ha resultado interesante, aunque he echado de menos el que se profundizase en la vieja religión del roble, y en los druidas.A lo largo de la historia el monje, junto con sus hermanos benedictinos, no conseguirán cumplir su objetivo de forma pacífica sino que se encontraran con personajes como Vlad Radú, un strigoi, que pretenderá destruir la obra que los monjes tratan de recuperar, o el rey Cormac, monarca despótico que no le pondrá en ningún momento las cosas fáciles a nuestro protagonista.
Un aspecto que me ha gustado mucho es que la trama de la novela girase en torno a la preservación del saber, de los conocimientos de la humanidad, de esos manuscritos que nuestros monjes querrán a toda costa salvar de las garras de la oscuridad y la ignorancia.
Entrando en temas más escabrosos, cabe hacer referencia a un par de peros que le he encontrado a la novela. Si bien, la historia resulta entretenida, y debido a la estructura de la novela la lectura se podría calificar de ágil, con algún que otro altibajo debido a las descripciones (que por otra parte a mi me encantan y por ello aunque el ritmo de la narración no sea tan rápido en cuanto a acción, yo disfruto igualmente de las mismas), debo hacer referencia al hecho de que a lo largo de la misma he encontrado alguna que otra incongruencia histórica, a la que ya han hecho referencia otros compañeros de lectura conjunta, como por ejemplo el trato que dispensan los monjes, ya no sólo Brian a la protagonista femenina de la novela (Dana), o las referencias a esta última como una joven lozana cuando por la edad de la muchacha en aquella época podría habérsela considerado como una anciana. En aquella época las mujeres no tenían ni voz ni voto, sin embargo ese no es el papel que cumple Dana en la historia, siendo un personaje tan importante ya no sólo para el lector, sino también para el resto de personajes de la misma, cuando realmente debería haberles sido a ellos totalmente indiferente.
Por su parte, resulta poco creíble la relación romántica que surge entre los protagonistas, incluso podría decirse que algo forzada, en mi opinión podría haberse omitido, aunque supongo que para gustos colores, y habrá gente a la que le habrá gustado ese toque romántico.Dichos peros aunque están ahí, y desde mi punto de vista, como novela histórica hay que tenerlos en cuenta, no han hecho que la novela me haya dejado de gustar ni mucho menos.
Por lo que respecta a la narración u forma de escribir de Juan Francisco, debo decir que desde mi punto de vista ha sido un acierto el que a pesar de utilizar un lenguaje cuidado y haya adecuado el mismo a la época, haya conseguido que cualquier lector pueda entender la novela sin dificultad alguna. La forma de narrar sencilla, pero cuidada hacen que las páginas vuelen entre nuestras manos sin problema.
La novela se estructura en capítulos cortos, y a su vez se divide en tres grandes apartados. cada una de estas partes podríamos decir que se corresponden en relación a la acción con la introducción, el nudo y desenlace de la misma. Dichos apartados van acompañados cada uno de ellos por una introducción hecha por un anciano que cuenta las leyendas y rumores que se ciernen sobre los lugares donde posteriormente transcurrirá la acción (Ejemplo de estos preludios lo tenemos en la sinopsis, más arriba transcrita, que le dan un aura misteriosa al relato, y que a mi personalmente me encantan).
Esta estructura en capítulos cortos sabéis que me encanta, y desde mi punto de vista agilizan la lectura, y permiten al lector hacer pausas que culminan con un final de capítulo, que ciertamente se agradecen para no perderse en la trama de la novela.
En conclusión, Las horas oscuras me ha parecido una novela entretenida, ágil y misteriosa, que probablemente tenga continuación, y que en el caso de tenerla no dudaré en adentrarme en sus páginas para poder seguir mi viaje con todos los personajes que la conforman.
Muchos besos!!