Hoy toca ponernos con la reseña de Las puertas de la eternidad, de Richard Dübell. Ya sabéis que hasta mañana a última hora podéis apuntaros AQUÍ y participar en el sorteo de dos ejemplares de la novela. Como veréis el libro vale mucho la pena.
Y es que no puedo decir otra cosa que me encantó. Es una muy buena novela histórica, estupendamente escrita, muy entretenida y que además da pie a cierta indagación sobre la época. Un lujo de lectura. Os cuento...
Alemania, 1250. El emperador Federico II, Stupor Mundi, fallece. La lucha por el poder se recrudece y el ambicioso y cruel conde Rudolf von Habisburch aspira a ser su sucesor.
Al mismo tiempo, la joven Elsbeth, monja cisterciense en el monasterio de Santa María y Teodoro, en Papinberc, ha decidido irse a los solitarios bosques de Steigerwald acompañada de algunas de sus hermanas y reconstruir el viejo monasterio. Podría así además alejar de Papinberc a la hermana Hedwig, que sufre ataques en los que tiene visiones y en los que profiere palabras heréticas que la podrían poner en peligro ante el obispo, que frecuentemente las visita. Pero la empresa de poner en pie el monasterio será una ardua tarea, y no lo tendrá nada fácil.
Las Cruzadas
A mucha distancia, en Tierra Santa, nos encontramos a Roger Trencavel, que se encuentra luchando por su vida. Ha sido hecho prisionero y esclavo por los herejes. Las terribles penalidades las está sufriendo junto a dos amigos Walter Longsword y Godefroy Arbalétrier. Pero los peligros le llegan por varios frentes. Roger es albigense, cátaro, y los propios cristianos le consideran también un hereje y la herejía se paga con la tortura y la muerte. En los brazos de estos tres cruzados muere Hertwig von Staleberc, un caballero que lleva un mensaje secreto del fallecido emperador. Rogers debe liberarse y seguir la pista de este secreto, que le llevará a Wizinsten.Allí en Wizinsten vive Constantia Wiltin, una bella joven que ha aceptado su destino: su boda con Rudeger. No es su mejor decisión pero no tenía otra alternativa. Además, oscuras nubes de su pasado la atormentan.
Son varias las tramas, como se ve, que inician la novela, historias que inicialmente parecen inconexas pero que van adquiriendo sentido a medida que se avanza en la lectura. El ir saltando de una a otra aligera y evita la pesadez de una historia lineal durante tantas páginas. Cada una de las historias es interesante y en conjunto presentan un completo cuadro de la época: las cruzadas, los caballeros, las luchas de poder, los horrores de la Inquisición, el día al día de un pueblo, las costumbres cotidianas, las celebraciones, la vida en los monasterios,... un lienzo magnífico del siglo XIII que cautiva y atrapa, y con el atractivo especial, al menos para mí, de la presencia cátara.
Richard Dübell
La historia se divide en 9 partes: Locus Horroris, Praeparatio, Fundamentum, Inceptum, Accomodatio Propositorum, Reformatio, Consummatio, Porta Coeli, y un epílogo final, y discurre durante dos años, marcados por las distintas estaciones. Cada una de las nueve partes se subdivide a su vez en capítulos cortos cuyo título corresponde al lugar en el que transcurre la acción.El estilo de Richard Dübell es opulento y rico en detalles y matices, tanto que por momentos se tiene la impresión de estar disfrutando las imágenes en una gran pantalla de cine. Abunda además en un sentido del humor irónico y por momentos cínico muy de agradecer.
Por otro lado, los personajes que Dübell crea son interesantes y complejos, personajes muy bien trabajados y presentados, atractivos y auténticos, con los que el lector realiza un viaje excitante y casi épico por el revuelto siglo XIII. Son muchos y muy variados los personajes que recorren las páginas del libro, por eso se agradece la nota inicial con los diferentes personajes con los que nos toparemos así como los comentarios sobre el contexto históricos y las características de los personajes históricos que se pueden leer al final del libro.
Símbolo cátaro
La tensión no decrece en ningún momento sino todo lo contrario, va in crescendo. Richard Dübell es un experto en mantener el interés y la curiosidad del lector a través de misterios, secretos, historias de amor, emoción y aventuras, con giros inesperados y sorpresivos. Y lo consigue desde el principio hasta el final haciendo muy difícil despegarse del libro. No olvidemos que son cerca de 800 páginas... ¡Todo un logro!Las puertas de la eternidad es un magnífico libro, con una estupenda historia y que proporciona grandes dosis de entretenimiento. Cree que no ha quedado duda alguna sobre lo mucho que me ha gustado, ¿verdad?
Marcapáginas 125