Llxll: Se atreve a definir la literatura en 140 caracteres?
Una de las manifestaciones intelectuales más plenas donde por medio de
la ficción logramos conocer la conciencia humana y el mundo real.
Llxll: Háblenos de su obra. ¿Qué tiene publicado? ¿Está trabajando en algún otro libro?
Acabo de publicar Las flores de Baudelaire, una novela de intriga,
ambientada en la primera guerra mundial, donde la psicología de los
personajes juega un papel fundamental en el desarrollo de la historia.
Es una obra que atrapa a todo tipo de públicos porque tiene distintos
niveles de lectura, según las exigencias de cada lector.
Sí, siempre estoy escribiendo. Ahora estoy metido en una novela un
poco loca que podría encuadrarla irónicamente en el capítulo de
autoayuda literaria.
Llxll: ¿Qué hay que tener hoy para editar en el España?
Curiosamente se abre una época mucho más democrática en el mundo
editorial donde los escritores tienen una variedad de posibilidades
amplia. Pueden intentar hacerlo con grandes editoriales o con
editoriales independientes que está siendo muy dinámicas. Pueden
autopublicarse en papel ya que los costes han bajado mucho. O puede ir
directamente a la vía digital como Amazon, etc y colocar sus novelas en
internet. En cualquier caso, es necesario tener un objetivo claro y
poner mucho tesón y mucha paciencia. Sacar un libro es un trabajo serio
que conlleva mucha responsabilidad.
Llxll: ¿Cómo trabaja? Es decir, tiene alguna metodología, manía…
He ido adaptando mi forma de trabajar. Al principio era más
exigente, quería tener el lugar adecuado, el tiempo preciso, silencio,
etc. Ahora escribo donde puedo y como puedo sin preocuparme demasiado
por las circunstancias de alrededor. La cuestión es escribir todos los
día porque pienso que la rutina es fundamental a la hora de narrar obras
de cierta envergadura. Por otra parte, no me gusta planificar mucho el
desarrollo de la novela. Suelo saber cómo comienza y cómo acaba, pero no
el proceso intermedio. Ahí dejo que la imaginación me vaya
sorprendiendo y me lleve de su mano. Es mucho más placentero, aunque
tiene sus riesgos de estancamiento.
Llxll: ¿Por qué escribe un escritor?
Por enfermedad. Los escritores somos seres obsesivos que
necesitamos expresarnos por medio de la escritura. De lo contrario nadie
dedicaría años de su vida a redactar algo que quizá nunca sea publicado
ni leído por nadie excepto los amigos. Yo, además, escribo por
venganza poética, porque pienso que los escritores debemos intervenir en
la realidad e intentar mostrar las injusticias de nuestra sociedad. No
quiero callarme.
Llxll: Nos puede recomendar algunos de los autores que usted cree son importantes y que un buen lector debería leer.
Son muchos, demasiados, pero a mí me han marcado en distintas
épocas de mi vida Balzac, Pérez Galdós, Unamuno, Camus, Graham Green o
Philip Roth, por mencionar algunos.
Llxll: ¿Qué opina de plataformas como la nuestra
donde los lectores comparten sus lecturas? ¿Las redes sociales pueden
llegar a cambiar la forma de leer y escribir?
Soy un enamorado de las redes sociales por lo que suponen de
enriquecimiento del panorama narrativo y lector. Desde que descubrí sus
posibilidades dedico tiempo a estar en contacto con personas
relacionadas con el mundo literario, desde editores, periodistas,
libreros o lectores. Es muy gratificante. En ese sentido, leer en
compañía va a suponer una revolución para la percepción de los libros y
la forma de interpretarlos.
Sin duda las redes sociales están cambiando la forma de escribir y
de leer. Vamos hacia una novela más corta, fragmentada, con hibridación
de géneros y menos descriptiva, pero igual de apasionante.
* Llibres per Llegir