La levadura es un ingrediente esencial a la hora de elaborar cerveza. Puede ser tanto en seco como líquida, dos opciones igual de válidas, pero que presentan algunas diferencias. ¿Queréis conocer mejor las posibilidades de la levadura líquida? Os lo explicamos en esta entrada.
La principal ventaja de la levadura líquida es la variedad y la calidad de cepas que ofrece, que es más amplia que otros formatos. ¿A qué se debe esto? La razón es que muchas cepas simplemente no se pueden liofilizar correctamente, por lo que no se pueden convertir en levaduras en polvo, siendo así la levadura líquida la única opción para preparar determinados tipos de cerveza muy concretos.
Eso sí, no todo son ventajas, sino que el precio es más alto que la levadura en polvo y la vida del producto es más corta, por lo que hay que consumirlo antes y conservarlo con cuidado dentro de la nevera.
Para aquellos cocinistas que quieran dar el paso y probar con la levadura líquida, hemos incorporado recientemente varios tipos de levadura en este formato de la marca White Labs. Una de ellas es esta levadura líquida European Ale para cervezas Ale de estilo centroeuropeo. La cepa permite hacer una variedad con bajo contenido en ésteres de sabor limpio y fresco. Cada sobre contiene levadura para hacer 20 litros.
Otra levadura líquida que disponemos en nuestro catálogo es esta tipo Oktoberfest. Sirve para conseguir cervezas lager de estilo alemán de gran aroma a malta, como las Bock. Para que sea un éxito necesita de una fermentación en frío.