Les animo encarecidamente a la lectura de los artículos citados. Estoy seguro de que les llevará a percibir con otra mirada, como a mí me ocurrió en aquel momento, el acontecer de esa América Latina tan cercana y tan lejana al mismo tiempo.
Sean felices por favor, y ahora, como también decía Sócrates, "Ιωμεν": nos vamos. Tamaragua, amigos. HArendt