Leer entre lineas

Si algo he aprendido de mis hijos en estos 7 años, es a leer entre lineas. Y está "habilidad" a medida que se va perfilando, es genial.
¿El problema?
Pues que a veces mi primera impresión es tan obvia que me cuesta creérmela  y la dejo pasar.
Hace días que sabemos que esta semana hay una excursión para la peque con el cole, yo siempre les doy la opción de ir o no a las excursiones: les explico a donde van, que harán y cuando volverán y si puedo, me apunto y voy también .
Esta era la primera excursión que iba a hacer mi hija y a mi me daba la sensación de que no era buena idea (por una serie de cuestiones que tampoco hace falta enumerar ) una vez que le expliqué todo, ella dijo que si, que quería ir. Bien.
Pagué la excursión, me apunté voluntaria, se hizo el sorteo y no me tocó, se lo expliqué y dijo que no pasaba nada. Todo Ok.
Pero comenzaron las "señales":
Mi hija me pregunta de día y de noche (exaltada) que cuando es la excursión y yo para facilitarla ese dato de manera que ella pueda controlar, le pegué unos mini- post it en cada uno de los días del calendario que faltaban, de manera que cada noche tuviera que quitar uno y ver así cuantos quedaban para el día "D".
Empieza a tener dolores de cabeza cada vez que me cuenta ( sin que nadie le pregunte) lo bien que se lo va a pasar en la excursión aunque yo no vaya.
De repente su muñeca "Maribel" se empieza a encontrar mal:
-" Está triste mamá, tiene miedo por que no quiere ir a la excursión de su "colequio. ¿Le cuentas un cuento para que se le pase?"
"Hablo" con "Maribel" y le digo que no tiene que tener miedo, que se lo puede pasar muy bien, pero que si no quiere ir a la excursión, no hace falta que vaya, que si quiere se puede quedar en casa con nosotras.
Antes de acostarnos, "Maribel" ya está tranquila y yo le pregunto a mi hija:
- " Y tu, quieres ir o prefieres quedarte en casa?"

-"ehhhh... me quedo contigo y nos comemos un waki!" (Esto es un bollito que ha visto en la tele y no se por qué, tiene unas ganas locas de probar

Mi pobre niña...yo sabia que ella no quería ir, pero ella quería, querer ir.
Todo el mundo diciéndole que se lo iban a pasar genial, que todos los niños iban...y ella quería seguir la inercia.
Finalmente ni "Maribel" ni mi hija irán a la excursión, aprovecharemos la mañana para hacer algo divertido solas.
Tiene mucho tiempo por delante para ir realmente convencida y no tiene por que pasar por algo que no le apetece.
La próxima vez no dudaré tanto de mi instinto.






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