Legislación contra corriente

En estos últimos días me han llegado dos noticias procedentes de lugares muy distantes, pero que van en la misma línea. En Estados Unidos cada vez se detectan más casos de cáncer de mama entre mujeres gestantes que postergaron la maternidad para después de los 30 años y al enfrentar este drama, la mayoría opta por preservar la vida de su bebé y someterse a nuevos tratamientos para combatir la enfermedad. Es un hecho comprobado que a medida que las mujeres retrasan el parto hasta que son mayores, la incidencia de cáncer durante el embarazo, en particular el cáncer de mama, aumenta.
Uno de estos casos es el de Lisa Peterson Bender, 32 años, (en la fotografía) a quien le diagnosticaron cáncer de mama a las 11 semanas de embarazo. Está a una semana de dar a luz a su primera hija que, según las pruebas de ultrasonido, está sana pese a los tratamientos de quimioterapia que su madre recibió en los últimos meses de gestación.  Lisa optó por someterse a una cirugía y sesiones de quimioterapia en su segundo trimestre de embarazo para detener la enfermedad mientras protegía a su bebé, demostrando un instinto maternal tan fuerte que incluso sorprendió a su esposo. Ya se está planteando la posibilidad de tener un segundo hijo y los médicos creen que es posible que esto ocurra. Por ahora, a por el primero.
Mujeres que están embarazadas, tienen cáncer y luchan por salvar su vida y la de sus bebés.
La otra noticia es de una Congresista de Perú: Fabiola Morales, congresista y candidata a la reelección por el Partido Solidaridad Nacional (PSN), afirmó que, dados los avances en la medicina, "no es necesario el aborto 'terapéutico', y por tanto es una ley que se debería derogar". Podía ser justificado como mal menor a comienzos de siglo, pero "la medicina ha avanzado a tal punto que una madre con alguna enfermedad grave, que incluso puede ser un cáncer, puede muy bien no solo concebir sino dar a luz y salvar la vida del niño y salvar la vida de la madre".
La congresista también denunció que existe "una fuerte influencia de organismos internacionales, una fuerte influencia que viene de fuera y con mucho dinero, que está apostando en contra de la familia, en contra de la vida y en contra de los valores".
Con mujeres tan decididas y valerosas como éstas, no podemos por menos de mostrarnos muy optimistas en la lucha por la vida