Leo todo lo que pillo

Ahogado en la sala de espera de un hospital, leo todo lo que pillo. Sorpresa, en una revista de auto ayuda tienen una sección con sentido del humor. Preguntan por la escala de valores de los padres y la propia. Un tipo responde esto: «La escala de valores de mis padres va de mal en peor. Antes me daban siempre la semanada y ahora no me dan ni los buenos días. Yo, en cambio, voy escrupulosamente a misa cada domingo y pago todas las facturas, incluidas las del meublé.»                                                                                            Firmado: Daniel, 39 años.                     

Leo todo lo que pillo