Revista Cine
Director: Jean-Luc Godard
Al final ayer sí pudimos ver "Les carabiniers", la quinta película de Jean-Luc Godard. "Les carabiniers" es también un alegato antibelicista, aunque diría que desde una perspectiva menos humanista que en "Le petit soldat". Ésta, es decir la de hoy, es puramente satírica y conceptual diría yo. La película nos cuenta la historia de dos hombres pobres que son reclutados por el Rey para ir a pelear a la guerra (todo esto, me parece, en un país ficticio, pero de resonancias europeas supongo), y si bien al inicio se muestran bastante reticentes a la idea, se convencen cuando les carabiniers que los reclutan les dicen que pueden hacer lo que quieran, con total impunidad, y que les espera un cuantioso botín si es que aceptan enrolarse. Luego de eso vemos escenas inconexas en donde estos dos tipos hacen toda clase de fechorías, sin el menor remordimiento (de hecho las dejan por escrito en cartas que envían a su esposa/hermana/hija qué sé yo, como si fuesen vacaciones), porque así lo quieren ellos o así les han ordenado que hagan. La sinrazón de la guerra queda patente (más aún, por si no había quedado claro ante tanta violencia gratuita) cuando los hombres regresan al hogar, tan pobres como antes, sólo dueños de un puñado de fotografías que, por un momento, los sume en la ilusión de poseer todo lo retratado, lo cual es bastante ingenioso y hasta divertido, pero de un orden simbólico algo fuera de lugar.
Debo decir que no me ha gustado realmente esta película, aunque entienda su discurso; no me ha gustado su tono, que aunque es satírico o lo que sea, me parece demasiado simple y gratuito, sumado a un relato que avanza a trompicones, acumulando y acumulando un vacío moral y humano que pierde impacto por el tono del film. Entre momentos interesantes y otros tediosos (además de un extraño inicio que parece evocar un poco al neorrealismo italiano, a esa marginalidad de Pasolini), la película parece flotar en un campo sin atmósfera, aunque, para ser justos, entre medio hay intertítulos y archivos de otros conflictos bélicos que sí logran transmitir el espanto y el pesar de Godard ante semejantes espectáculos, supongo que por contraste ante un par de personajes estúpidos y sin carácter envueltos en desventuras cuasi infantiles. Hay un punto ahí, pero lo que no funciona (o lo que funciona menos que lo demás) es el relato y los personajes. Curiosamente, el tramo final me parece verdaderamente bueno, acaso en esos breves diez minutos (o menos) se entienda y se palpe mejor la sinrazón de la guerra, la sensación de caos y desconcierto, desorientación, siendo esta vez los protagonistas quienes experimenten y observen la sensación de despojo que antes ellos provocaran en personas inocentes.
No estamos ante el Godard más memorable, no es "Les carabiniers" un film que vaya a guardar con mucho esmero en mi mente, pero vale la pena verla, ¿por qué?, porque así es el cine: hay que verlo todo, o al menos, morir en el intento...