Leyendo cuentos también en la tele

Si fuera por mi hijo, nos pasaríamos el día contando cuentos, enlazando historias, relatos inventados, recuerdos y chascarrillos, y leyendo todo tipo de libros, quizá hasta el diccionario. El jueves pasado leímos también en televisión, en el informativo de mediodía de TVE1, ni más ni menos. Contamos en antena nuestra experiencia leyendo el libro ‘El conejito que quiere dormirse’, del que dicen que es infalible para dormir a los niños. Una experiencia que adelanté en este post, que ha sido el más leído de septiembre.

En el reportaje que firma Ángela Alcover, los psicólogos a los que se pregunta por este libro no se ponen de acuerdo: para unos se emplean simplemente técnicas de relajación para los niños, mientras que otros advierten de que puede ser peligroso porque recurre a la hipnosis. De cualquier manera, a nosotros sigue sin funcionarnos, más allá de que sí relaja a mi hijo.

Reitero mi opinión: sirve para dormir al niño que realmente quiere pero no puede por estar nervioso, preocupado o excitado. Pero si el niño se resiste, mejor emplear ese tiempo en calmarle con otros recursos. Después de todo lo que se ha dicho, creo que recurriré a él en contadas ocasiones, cuando me lo pida y contado a nuestra manera.

Si te interesa ver el vídeo del reportaje, puedes verlo pinchando en este enlace.

Es un vídeo que me guardo de recuerdo y que me ha encantado porque mi peque no puede salir más bonito. No me gusta sacar a mi hijo en las fotos del blog, al menos no de forma que se le reconozca completamente, aunque reconozco que cada vez me cuesta más hacerlo y que me exige ser muy creativa en las imágenes. Por ese motivo estuve dudando si pixelar o no al pequeño, pero al final decidí que sería un emotivo recuerdo y que valía la pena grabar un gesto tan bonito como el de un niño escuchando embelesado un cuento.

Creí que la grabación y la entrevista nos iba a costar más, pero al final fue todo muy sencillo. Eso sí, tuve que engañar al protagonista con dibujos y tortitas para que colaborara. No quiso ponerse el pijama para la grabación, y por eso se quedó en camiseta y body, pero en cuanto saqué el libro corrió a leerlo a mi lado y no hizo falta decirle nada. Y eso que unos minutos antes regañó a los periodistas por colocar un trípode en medio de su habitación. 

¿Qué os ha parecido el reportaje? ¿Os atrevéis a leer este libro?