Estoy de mudanza y rodeada de cajas de enseres, así que tengo muy poco tiempo para cocinar, y además el kit de la Barbie cocinillas está ya metido y sellado en alguna caja que luego seguro que me costará mucho encontrar.
Mudanza es sinónimo de estrés, agobio y sudada mortal. Y para los sofocos veraniegos no hay nada mejor que beber algo frío directamente de la nevera, y si es a morro aún mejor. Así que me he animado a hacer mi propia versión de limonada para el reto de Memòries d´una cuinera, con un toque de cardamomo.
Es una receta muy sencilla y perfecta para tener en la nevera porque se hace en un momento. Ácida y con un toque sutil de cardamomo, que para los que no sepan a qué sabe, tiene un aroma cítrico y un gusto especiado y chispeante (cómo se describe un sabor?).
Limonada al cardamomo:
Dificultad, así de primeras:muy fácil. Probabilidad de complicaciones:encontrar cardamomo en la tienda. Presentación:amarillo y en botella. Sabor: fshhhhh. Recetas de inspiración:en parte, Pham Fatale
Ingredientes: (1 litro)
1/2 taza de azúcar de caña1/2 taza de azúcar blanco2 limones1 lima10 vainas de cardamomouna pizca de salagua fría
Preparación: Primero, aviso de que se puede usar el azúcar que prefiráis: blanco, moreno, moscovado, etc. Yo he puesto en conjunto una taza, pero si os gusta la limonada más ácida tendríais que echar entre media y 2/3 de taza, o más de una si os gusta muy dulce.
He usado 2 limones y una lima porque me gusta el olor que aporta ésta última y además tenía una rodando por casa: perfectamente podemos usar sólo limones, 3 pequeños o 2 grandes.
El cardamomo es una especia un poco rara y no suele encontrarse en grandes superficies sino en tiendas especializadas, entero (con las pequeñas vainas que veis al principio del post) o en polvo. "Tienda especializada" no tiene porqué ser igual a "delicatessen" o "tienda extra-cara", yo compro cardamomo en un puesto del mercado donde tienen sólo especias!
Primero hay que preparar un sirope de cardamomo: este paso ayudará a disolver el azúcar y a sacar más aroma de las semillas infusionadas. Si tenéis el cardamomo en polvo, perfecto, si lo tenéis entero como yo, hay que meter las vainas en una bolsa de plástico y aplastarlas con un rodillo, o en un mortero. Así podremos separar la cáscara de las semillas interiores (redondas y oscurillas).
Calentamos la taza de azúcar al fuego junto con una taza de agua, hasta que se disuelva completamente. En ese momento, y sin que la mezcla hierva, agregamos las semillas o polvo de cardamomo y dejamos reposar unos 2 minutos. Después lo apartamos del calor y dejamos enfriar, echando el sirope en un vaso.
El sirope se puede colar pero a mí me gusta que se vean las semillas nadando por ahí...
Mientras, exprimimos los cítricos y echamos una pizca de sal en el zumo. Cuando el sirope esté frío, hay que mezclarlo con el zumo, y éste con agua fría al gusto, según se desee un sabor más o menos concentrado.
Yo simplemente eché el limón + cardamomo en una botella de un litro, y añadí agua hasta llenarla del todo. Ahora solo hay que esperar un rato a que la bebida esté bien fría, y ya está!
Otro tema antes de perecer devorada por la mudanza:
Ya tenemos ganador del colgante cupcake!!! el viernes resultó ganadora a través de Sortea2 Dae Neris, una seguidora de Facebook. Si no se pone en contacto conmigo en unos días, volveré a sortear el premio, así que no os deis por vencidos...