El cuento, como género literario, se define por ser una narración breve, oral o escrita, en la que se narra una historia de ficción con un reducido número de personajes, una intriga poco desarrollada y un clímax y desenlace final rápidos. Durante los próximo meses voy a traer hasta el blog algunos de los relatos cortos más famosos de la historia de la literatura universal. Obras de autores como Philip K. Dick, Franz Kafka, Herman Melville, Guy de Maupassant, Julio Cortázar, Alberto Moravia, Juan Rulfo, Jorge Luis Borges, Edgar Allan Poe, Oscar Wilde, Lovecraft, Jack London, Anton Chejov, y otros... Espero que los disfruten.
Continúo hoy la serie con "El ruido de un trueno", de
Ray Douglas Bradbury (1920-2012), escritor estadounidense de misterio, género fantástico, terror, cuentos y novelas de diversos géneros, desde el policial hasta el realista y costumbrista, además de poemas y ensayos. Se le conoce sobre todo como escritor de ciencia ficción. Sus novelas "Crónicas marcianas" (1950) y "Fahrenheit 451" (1953) están entre las más famosas del género. También trabajó como guionista en numerosas películas y series de televisión, entre las que cabe destacar su colaboración con John Huston en la adaptación de Moby Dick para el cine (1956). Un clima poético y un cierto romanticismo son otros rasgos persistentes en la obra de Ray Bradbury, si bien sus temas están inspirados en la vida diaria de las personas. Por sus peculiares características y temáticas, su obra puede considerarse como exponente del realismo épico, aunque nunca la haya definido de este modo. Dejó dicho sobre sus obras que "nunca trató de hacer predicciones acerca del futuro, sino avisos. Es curioso, añadió, que en mi país cada vez que surge un problema de censura sale a relucir como paradigma de la libertad "Farenheit 451". Los intelectuales, ya sean de derechas o de izquierdas, siempre tienen miedo a lo fantástico porque les parece tan real ese mundo que creen que estás intentando engañar y, evidentemente, así es. Vivimos en un mundo que nos absorbe con sus normas, con sus reglas y la burocracia, que no sirven para nada. Hay que tener mucho cuidado con los intelectuales y los psicólogos, que te intentan decir lo que tienes que leer y lo que no". Existe un asteroide llamado "9766 Bradbury" en su honor.Y ahora, como decía Sócrates, "Ιωμεν", nos vamos. Sean felices, por favor. Tamaragua, amigos. HArendt
Ray Bradbury
Entrada núm. 2370
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La verdad es una fruta que conviene cogerse muy madura (Voltaire)