Liv e Ingmar

El film de Dheeraj Akolkar llegó a Buenos Aires tres años después de su estreno oficial.

El Artemultiplex y el Bama Cine Arte siguen proyectando Liv & Ingmar, documental de Dheeraj Akolkar que se estrenó en Buenos Aires a mediados de octubre, y que acompaña la reposición de Persona en esas dos salas y en el cine Del Centro. Además de coincidir espacialmente con la película de Ingmar Bergman, el largometraje del realizador indio la cita en varias oportunidades mientras cuenta la historia de amor y amistad entre el maestro sueco y la actriz Liv Ullmann.

“Primero dije que no. Dheeraj me había escrito una carta uno o dos años antes y en ese momento me dije Seguro, puedo formar parte de esta película. Pensé y volví a pensar en eso porque la carta me había emocionado mucho. Luego olvidé todo hasta que los productores me llamaron. Estaba en Oslo cuando me preguntaron ¿Quiere participar?. No, no quiero, contesté. Bueno -replicaron- el director va a hacerla de todos modos. ¿No quiere encontrarse con él?. Les respondí que no porque, si aceptaba, pensarían que terminaría haciendo la película. Pero ellos insistieron y al final accedí a conocer a Dheeraj. Me cayó bien enseguida porque sabe escuchar. Entonces le dije: ¿Sabés? Me gustaría trabajar con vos porque me gustaron tus preguntas. Haré esta película con una condición: sólo dos días de entrevistas, y podés usar la escena de la lectura que ya está ahí. Nada más“.

Así recordó Ullmann el comienzo del proyecto en esta entrevista que Indiewire publicó en octubre de 2012, cuando Akolkar presentó su trabajo en el Festival de Cine de Nueva York. Tres años después, la pantalla grande transmite la comodidad de la actriz frente a un interlocutor que nunca aparece ni formula sus preguntas ante cámara, pero que los espectadores imaginamos ante todo respetuoso.

Fragmentos de Saraband, Escenas de la vida conyugal, La pasión de Anna, la mencionada Persona; filmaciones caseras, fotos y cartas que Liv atesora junto con sus recuerdos personales y profesionales más preciados; las declaraciones de la entrevistada; la intervención del propio Bergman no sólo cuando la actriz lo nombra sino a través de la voz en off del actor Samuel Fröler constituyen la materia prima de este documental filmado dentro y fuera de la casa que el realizador construyó en la isla de Fårö. La fotografía de Hallvard Bræin es tan bella como aquélla que convirtió al ya fallecido Sven Nykvist en escolta artístico de Ingmar.

Mientras asistimos a una historia de (des)amor, los espectadores repasamos la carrera de los integrantes de la pareja protagónica, sobre todo de Ullmann. También nos reencontramos con personajes bergmanianos que encarnaron los igualmente admirados Max von Sydow, Erland Josephson, Bibi y Harriet Andersson.