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Lo femenino y lo masculino en los Libros Sagrados

Por Lasnuevemusas @semanario9musas

Expresarse en esta época es difícil principalmente porque no se sabe escuchar ni con los oídos ni con la vista, ni con el tacto.

Lo femenino y lo masculino en los Libros SagradosRegularmente falta ese silencio que lleva a captar las palabras leídas, palpadas y escuchadas a través de esa inocencia primigenia la cual nos lleve a eliminar conceptos anteriores, ideologías y sobre todo nos haga eliminar la imposición de nuestra creencia sobre un tema, el cual en muchas ocasiones se forma de fragmentos de información malinterpretados o tomados a conveniencia dañando la esencia de la sabiduría.

Esto es lo que ha sucedido con los Libros Sagrados y la Religión, los cuales se han confundido con dogmas/doctrina y religiosidad, dañando el mensaje.

Actualmente se tiene la creencia de que negar a D/os o hacer burla de ciertos preceptos religiosos saca del círculo de los ignorantes y ensimismados, sin embargo, esto no es así, ya que no existiría la filosofía, la historia, el arte, las ciencias, la literatura sin grandes hombres y mujeres amantes de D/os, de las religiones y de los Libros Sagrados.

¿Podría entenderse la filosofía sin santo Tomás de Aquino, santa Teresa de Ávila? O la ciencia sin Antonino Zichichi (1929). Físico italiano, Erwin Schoöringer, católico premio nobel en 1933, George Lematrie, jesuita y su teoría del Big Bang, Nikola Tesla, serbio cristiano ortodoxo creador de la energía eléctrica por corriente alterna, Ramón y Cajal, español católico premio Nobel de medicina en 1906 por sus estudios sobre el sistema nervioso, Max Plank católico Nobel de física en 1918 protestante o Maria Agnesi (1718) matemática y geómetra analítica, Neta Bahcall, (1942) judía astrónoma, astrofísica y cosmóloga, Pamela Gay (1973) y su astronomía galáctica, Lise Meitner (1949) física nuclear, Wu Yi-Fang bióloga y filósofa, Musimbi Kamyoro premio Nobel de la Paz activista social y política, por mencionar algunas.

Lo femenino y lo masculino en los Libros Sagrados

Es así como sin importar el género, el amor a D/os en cada uno de ellos se ha convertido en una utopía que lleva a construir cada día un mundo mejor al salirse de sí mismos para otorgar a los demás como lo hace D/os. Y es este salirse de sí mismo para entrar en el otro lo que da vida a la raíz de la sexualidad, la cual va más allá de un coito, en el cual, en muchas ocasiones el orgasmo no existe.

El Orgasmo místico como se percibe en el éxtasis de santa Teresa se encuentra cuando el ser humano se ha vaciado de su individualismo, de su persona y se ha revelado como un ser humano que lleva en sí mismo la palabra de D/os, palabra que si se percibe desde el Shema, y desde el Dumah, Escucha y Silencio se comprende como una dualidad, una Imagen y Semejanza la cual no lleva en su esencia la igualdad, porque desde la Palabra de D/os la diferencia de cada ser humano es lo que nos acerca a la Hayya o al Prana, es decir, al aliento que nos revela semejantes. Somos diferentes y ese es un valor intrínseco e implícito, el cual habita en las palabras hombre y mujer nos creó, y aquí es donde se debe de explicar.

Lo femenino y lo masculino en los Libros SagradosDios creó a la humanidad con estás dos características. Por principio habrá que explicar que Adan o Adaham significa humanidad, de esta manera, Hashem creó a Adaham hombre y mujer, le entregó la dualidad y la colocó en su cerebro, en el hemisferio derecho lo femenino, lo que crea, ama, en el hemisferio izquierdo lo que decide, el poder, la fortaleza, lo masculino. Es así que Adaham, la humanidad está creada de la dualidad de lo positivo y negativo, no desde la visión de lo bueno o malo, sino semejante a la visión taoísta del Ying y el Yang, Adaham tiene esa esencial dual porque está creado del Uno, de D/os, de Hashem de Allah. No hay diferencias, porque el hombre y la mujer como género a lo largo de su día habitan entre su parte masculina y femenina.

La mística hebrea explica que Hashem creó a partir de las letras hebras, las cuales sin excepción son femeninas, habitadas por la Shejina o parte femenina de D/os, Sakina llamada en el islam, Devi en el hinduismo, Divina Providencia en el cristianismo. Y creó con Bet, porque bet es la segunda letra y al ser la segunda -dos- lleva lo masculino y lo femenino, es braja, bendición, palabra femenina, y es, hogar, casa aj - camin voz masculina, donde nuevamente se une la dualidad.

Por otra parte, el sefer Bereshit o libro del Génesis nos dice que la mujer fue creada de la costilla, No de la cabeza para que domine, no de los pies para no sea esclava, de la costilla símbolo de la igualdad. Agregando que costilla en hebreo es Tsela, palabra femenina que nos recuerda que la mujer fue creada del centro de Adán, su sostén, donde adquiere su fuerza, su costilla, cualidades que ambos comparten.

Lo femenino y lo masculino en los Libros Sagrados

Esta sabiduría se encuentra en los primeros capítulos, entonces, la pregunta es, ¿por qué se dice que la Biblia es un libro machista? Al seguir leyendo nos encontramos con la caída, nefilá, la cual también es femenina, pero la caída no tiene el significado de pecado que le dio san Pablo y san Agustín a partir de una lectura moral, no, la caída desde la ética antigua es lo que todo Hombre necesita para crecer, es la reflexión, la meditación de cada acto, es la fortaleza y la sabiduría.

Siguiendo con la lectura D/os se acerca al hombre y le pregunta she´ela, (palabra femenina) siendo en esa pregunta donde D/os otorga a la humanidad el libre albedrio, porque al preguntar el hombre y la mujer entran en sí mismos, entonces, nuevamente vemos que D/os toma su parte femenina para otorgar la libertad de decisión al ser humano, le entrega la Esperanza, ticvá -palabra femenina- y le derriba el destino o goral-, lo predestinado, goral es una voz masculina, esto nos enseña que es lo femenino lo que elimina la dependencia a los caprichos de los dioses como lo era en la antigüedad, con esta she´ela retorit o pregunta retórica de D/os, lo femenino le da libertad a la humanidad. La ticvá es más fuerte que Ha goral, es decir lo que crea es más fuerte y necesario que la fuerza y el poder.

Lo femenino y lo masculino en los Libros SagradosSiguiendo la lectura bíblica nos encontramos con la época patriarcal, ( patriarj) los patriarcas fueron hombres que custodiaban a toda una comunidad, analizaban las forma de vida de todo el pueblo, encaminaban a que cada uno actuara con justicia, ( tsedec - betsedec-); nuevamente una palabra femenina, a sus lado estaban las matriarcas quienes tenían el mismo poder, pero destinado a otras actividades, la casa el hogar, los hijos, lo cual no debe de verse como algo inferior, al contrario, en sus manos estaba el desarrollo para bien de cada niño, ellas custodiaban su educación, le otorgaban lo necesario para saber utilizar la fuerza, ¿por qué? Muy simple, la mujer establecida en el niño su lado femenino, desarrollaba su hemisferio derecho para que a la edad de 12 años comenzará su desarrollo masculino y a la niña su fuerza interior masculina, su hemisferio izquierdo. Ninguna de las actitudes de los patriarcas tiene relación con lo que actualmente se entiende y se le ha llamado Patriarcalismo, además el termino ismo otorga el significado de doctrina, lo cual aleja por completo la misión que se tenía en esa época, en donde tanto los patriarcas como las matriarcas tenían clara la debilidad y la fuerza, la creación y el poder de decisión que cada ser humano debe desarrollar a su tiempo.

Por otra parte, se encuentra Judit, quien salva a su pueblo de Holofernes, jefe supremo del ejército asirio, Rut, mujer pagana que da origen a la descendencia del rey David y Ester, quien descubre las mentiras de Amán y salva a su pueblo.

Lo femenino y lo masculino en los Libros SagradosEn el Nuevo Testamento tenemos la Encarnación en el libro de Lucas, quien escribe al pueblo griego, es de recordar que la civilización griega si desestimaba a la mujer, entonces D/os a diferencia de Zeus a quien le gustaba una mujer y la tomaba sin tocarla porque un dios no podía tocar a una mortal, el D/os del nuevo testamento envía a un ángel a preguntarle a una mujer si está dispuesta a ser la madre de Su Hijo, María responde con un Fiat, es decir, Sí, pero no es un sí simple, que lleva en su interior un sí con toda mi voluntad, con toda mi reflexión, con todo mi pensamiento y decisión porque, María resguardaba todo en su corazón, porque el corazón en la antigüedad era la sede del entendimiento y de la razón. Entonces en ese acto el D/os de Jesús le retorna la dignidad a la mujer, le regresa y le recuerda que en sí misma tiene la capacidad de decidir su vida y que nada depende de los dioses.

Después a lo largo de los Evangelios vemos la negación de Pedro, la traición de Judas, la falta de fe de Tomás de frente a la fidelidad de María, de Magdalena y de su madre, siendo ellas quienes dieron vida al cristianismo, religión encarnada, es decir, desde el vientre de una mujer.

Lo femenino y lo masculino en los Libros SagradosAhora pasemos al budismo, en donde a través del tantra, la unión sexual del Yab-yum, es decir, de Padre y Madre el ser humano se forma. La unión sexual en el budismo y en el hinduismo así como en las religiones del libro se considera una caridad, lo más sagrado, donde se encuentra la verdad absoluta, es el orgasmo donde lo femenino y lo masculino regresan a su unidad, es así que las imágenes del aspecto de dos en la unidad, es decir, el Amor y la Compasión van de la mano, siendo al contrario de lo que se cree, la Sabiduría femenina y el Amor masculino, así vemos a Akasadhatisvari esposa de Vairochana, el buda blanco, llamada la Soberana del Espacio Infinito y quien representa el espacio en donde caen los rayos de luz de su esposo, ella es la receptividad espiritual sin límites, Ella es el despertar.

Después está Lochana esposa de Akshobhya el buda azul oscuro, el buda del este, Ella es la dama de la visión clara, la dama con un ojo, es la conciencia pura, la sabiduría trascendental; la tercera es Mámaki esposa de Ratnasambava, el buda amarillo del sur, Ella es la Dama que hace todo mío, es decir, la que hace que todo sea gozo; la cuarta es Pandaravasini pareja de Amitabha el buda rojo del occidente, es la Dama del hábito blanco, Ella es la acumulación gradual de toda la energía, la que sana de las influencias nocivas del exterior, y la quinta, Amoghasiddhi pareja del buda verde oscuro o buda del norte, es la dama que se transporta en el rio del nacimiento y la muerte, Ella es la que lleva al Nirvana a la cima, quien guía a la materia hacia la luz, sin olvidar que cada una tiene su parte colérica donde la masculinidad se hace presente.

Como podemos ver cada buda tiene su raíz en su parte femenina.

Ahora pasemos al hinduismo comenzando por Devi, Ella es el corazón de las diosas, es la representación de todas las deidades femeninas, y es la manifestación femenina del D/os supremo como ya se mencionó, ella otorga a Lakshmi, Saraswati y a Durgá la parte femenina de la Trimurti (Brahma, Shiva, Visnú) el poder de crear, conservar y destruir. Además de ser la única con el poder de otorgar cada encarnación.

Lakshmi da riqueza, prosperidad y abundancia. Otra diosa importante es Sarawati diosa del saber, del arte de la verdad, de la pureza, Kali diosa destructora del ego y del mal, sus cuatro brazos que marcan los puntos cardinales derriban todo el mal que habita en el ser humano. Es la diosa guerrera, la más fuerte, la que dominará esta nueva era. Durga, diosa de la victoria sobre el mal, Pavarti, diosa del amor fraternal esposa de Shivá, quien le da consuelo, es la Madre Divina; Ganga diosa personificada del Ganges, madre del hijo de Shivá, Ganga es la segunda diosa más importante porque es quien da vida al pueblo indio, en sus aguas se encuentra todo lo que el ser humano necesita.

Pasemos al islam, quizá la religión más controvertida y poco comprendida, en el Corán se enaltece a la mujer, incluso dentro de los Libros Sagrados es el único que constantemente hace la distinción al decir, y Allah dijo al hombre y a la mujer..., porque la mujer y el hombre tienen los mismos derechos..., el islam desde el 632 otorga un valor fundamental a la mujer, la mujer es una flor, es Zahar la flor, a quien se debe tratar con delicadeza y respeto. El islam otorga un gran valor a la mujer. Incluso la universidad más antigua de la educación islámica lleva el nombre de quien la creó, una Mujer.

Lo femenino y lo masculino en los Libros SagradosLa mujer en el islam es valorada más allá de su belleza, se le valora su inteligencia, su creación, sus propuestas, tiene derecho a la educación, no se queda como madre soltera o desprotegida, el hombre debe otorgarle todos los derechos, sus familiares varones la apoyan para crecer. Se encuentra más allá de las modas, de las imposiciones sociales, ella decide y fortalece su feminidad con estudio y prosperidad intelectual, que es lo más importante y un punto fundamental en el islam el estudio y la memoria.

Con lo poco descrito hasta ahora percibimos la sabiduría y el valor otorgado a la mujer en los Libros Sagrados. La mujer como hemos visto es más que un género, es una fuerza indescriptible que fundamenta al hombre. El hombre y la mujer no son iguales, cada uno otorga una fuerza natural y universal a la existencia, cada uno tiene una misión que debe cumplirse juntos, uno sostiene al otro, como el hemisferio derecho y el izquierdo forman el cerebro. Ninguno debe de tener más derechos, ninguno tiene más fuerza o más voz, somos uno que se desteje y teje, se contrae y se expande como el big bang, como el Tzim Tzum, el hombre y la mujer son el Cielo y la Tierra, el Agua y el Fuego, la Palabra y el Silencio.

Los Libros Sagrados son textos sencillos con mucha sabiduría oculta la cual debe de irse descifrando de manera similar a la vida, y a través de ellos se nos explica que la palabra crea y destruye y que lo dicho con desconocimiento lleva a la ignorancia y está a la violencia.

Somos femeninos y masculinos, imagen y semejanza, somo dos en Uno, ahí esta nuestro valor, somos Vida y Muerte, no podemos existir el uno sin el otro, porque, así como la pierna al dar un paso se sostiene en la otra porque si no cae, de la misma manera si el hombre y la mujer no se sostienen alguno caerá.

Vivimos una época difícil, y esta dificultad puesta en nuestro camino para tener sabiduría y fortaleza la sobrepasaremos juntos, unidos entretejiendo cada diferencia. Las semejanzas las conocemos nuestras diferencias no, y en ellas debemos profundizar para ser los elementos que ayuden a germinar la semilla de D/os que habita en cada corazón.

No somos iguales, somos diferentes y en eso está la mayor bendición, en ello habita la fuerza y la sabiduría, en unir lo distinto para seguir buscando, construyendo, creando con Compasión, con Trabajo, con Bondad, Verdad, con Alianza, Amor y Misericordia

Para concluir repito que sí, D/os creó a Adaham a la humanidad, Hombre y Mujer, femeninos y masculinos nos creó y vistió nuestra energía con vestimentas de carne para habitar en el paraíso en ese Gad Edén, en ese Cielo, en el Yanna, en el Nirvana el cual tiene su Principio en el rostro de cada ser humano.

Lo femenino y lo masculino en los Libros Sagrados

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