Lo pintes como lo pintes

Una privatización es una privatización.

Cuando un ayuntamiento cede suelo y edificios a la iniciativa privada para la gestión de escuelas, se llama privatización. Lo haga quien lo haga. Lo gestione una fundación laica y progre o lo más recalcitrante del ultracatolicismo.

Hoy me acabo de enterar que el Ayuntamiento de Rivas acaba de ceder al chantaje de las políticas educativas que el gobierno regional está planteando. Una derrota que sin duda duele más por ser un Ayuntamiento de Izquierda Unida el que ha cedido.

La Escuela Pública necesita posiciones de firmeza porque si no está avocada a su desaparición. El tratamiento de shock al que le está sometiendo el gobierno de Aguirre es muy eficaz y consiste en el desmantelamiento de cualquier resistencia tanto de las administraciones locales como de los ciudadanos, que se ven obligados a tragar con todo lo que les echen. Si quieres infraestructuras educativas, la condición es ceder espacios a la privatización. Se le crea un problema al alcalde de turno porque la administración más cercana es el Ayuntamiento, parachoques de todas las protestas y se tiene el cinismo de negar la evidencia porque no se niegan a construir colegios: Se niegan a construir colegios PÜBLICOS.

Se llama chantaje y el objetivo es el desmantelamiento progresivo de la educación pública. La instauración de un sistema dual favoreciendo la educación privada sobre la pública. Se camuflan las palabras entre derechos a elegir y conciertos. Se confunde al ciudadano interesadamente. Y se presiona hasta el hastío a las administraciones que se niegan a rezar el mismo credo.

Cruzar esa línea, la de aceptar esos planteamientos ultraliberales tiene un coste de futuro inmenso: la desaparición de los servicios públicos en la educación. El desmantelamiento de las políticas sociales. La instauración de modelos neoliberales tanto en lo económico como en lo social. Pero también la indiferenciación política, la homogeneización de las propuestas, la renuncia a la política por la gestión.

Primero fue un Ayuntamiento socialista el que se plegó. Hoy es uno de Izquierda unida.

En La Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid hoy se oye parafrasear metafóricamente aquella frase:

En el día de hoy, cautivo y desarmado el ejército rojo, han alcanzado las tropas nacionales sus últimos objetivos militares. La guerra ha terminado.

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