El partido que Argentina disputó esta mañana ante Japón era, a priori, un amistoso más de los dirigidos por Batista. Sin embargo, el rendimiento mostrado por los jugadores argentinos en la cancha dejó más dudas que certezas.
Nada tuvieron que ver las actuaciones de Messi , Tevez o Higuaín, con lo visto ante España principalmente e Irlanda. Incluso el ingreso de Pastore, Bolatti ni Di Maria, le dieron más fútbol al equipo del Checho.
Tanto Mascherano como Batista, capitán y técnico, afirmaron que el hecho de tener que viajar a un lugar tan lejano repercutió en el físico del plantel (salieron lesionados Bolatti, Diego Milito y Cambiasso) y que probablemente haya sido la principal causa del bajo rendimiento. Aunque el “Checho” se encargó de aclarar: “Se perdió ante un equipo que jugó bien y estuvo ordenado. Esta Selección le ganó a España y perdió con Japón. No éramos unos fenómenos antes ni un desastre hoy por perder”.
En lo que respecta al juego en sí, Japón no es el seleccionado que supo ser cuando enfrentó a nuestro país en el Mundial de Francia 98. La evolución del fútbol nipon se vio reflejado en la última Copa del Mundo, teniendo buenas actuaciones, llegando a octavos de final y perdiendo con Paraguay por penales. En Sudáfrica pudimos ver a jugadores como Honda, quizás el delantero con más técnica de los asiáticos.
Hoy por la mañana realizaron una buena actuación, con presión en todos lados del campo y saliendo rápido de contra, obtuvieron la primera victoria en la historia frente a nuestro país, gracias al gol de Okazaki a los 19 minutos del primer tiempo.
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