Lo que dice la prensa Española en Cannes (Jornada 3)

En la tercera jornada, con otras dos nuevas películas a competición, parece ser que hemos encontrado la primera gran favorita, y es que el nuevo trabajo del japonés Kore-eda, ha entusiasmado a (casi) todos, pero además si hay algo que si ha despertado unanimidad es el hecho de que es una película hecha a la medida del director del jurado Steven Spielberg. Menos suerte han corrido los medios allí acreditados con la siguiente película, Jimmy P. de Desplechin parece haber gustado bastante menos, aburrimiento y ronquidos en la primera sesión de la mañana.
Como siempre os dejamos las críticas de la prensa y empezamos a apuntar al japonés Kore-eda en nuestra quiniela.
LIKE FATHER, LIKE SON (Hirokazu Kore-eda)

Por fin hemos visto una gran película. (...) Están contandas las relaciones, la dificultad de educar, el amor entre padres e hijos, con una complejidad y con una poesía y con una veracidad admirables. Es la mejor película que hemos visto.

Carlos Boyero (El País)

Todos los tópicos y torpezas que antes se evitaron, ahora se convierten en el argumento. Tan triste. Tan extraño. (...) Una acumulación de caminos más o menos evidentes con el dudoso privilegio de la obviedad. (...) Si esta película tuviera un reparto de Hollywood no estaría en Cannes, se digeriría con palomitas. Muy extraño.

Luís Martínez (El Mundo)

Kore-eda socava los pilares del tradicionalismo nipón, no con un producto corrosivo y amargo, sino pleno de humanismo, cálido y bienintencionado. En manos de alguien menos capaz seguramente Like father, like son se hubiera convertido en algo adocenado y cursi pero Kore-eda evita con facilidad tal camino y consigue en cambio que su cinta transite por el de la sonrisa constante y el buen gusto.

Martín Cuesta (Cinemaadhoc)

La complejidad de la propuesta es tratada y respetada con tanta inteligencia que todo parece sencillísimo; accesible. Disfrutable a más no poder, tanto en el drama como en la comedia, configurando estas dos facetas sobre las que bascula la narración un terreno ideal para encontrar, después de lo desgarrador, la ternura y la felicidad más absolutas y sinceras.

Víctor Esquirol (Naiz)

Spielberg ha debido conmoverse con Like Father, Like Son de Kore-Eda. Una convincente exploración melodramática sobre la paternidad.

Carlos Reviriego (Caimán Cuadernos de Cine)
JIMMY P. (Arnaud Desplechin)

Me ha parecido un coñazo. (...) El tema me da igual, y la forma de hacerlo de Desplechin me resulta cansina y monótona. Me da lo mismo. Lo que he visto, porque me he pegado alguna cabezada, me ha parecido muy aburrido, a pesar de Benicio del Toro, que es un actor muy magnético. Pero a pesar de eso me he dormido.

Carlos Boyero (El País)

La cinta se mantiene encerrada en sí misma y se limita a ofrecer el proceso entero al patio de butacas. En crudo, sin conclusiones, sin avances, sin historia si me apuran. Es el propio espectador el invitado a reconstruir, destruir y volver a montar las piezas de un puzle tan enigmático como magnético.

Luís Martínez (El Mundo)

Ronquidos en la primera de la mañana. No se salvan ni las interpretaciones, no existe química entre Del Toro y Almaric. ¿Está basado en hechos reales? Joder, pues si es tan jodídamente aburrido invéntate algo.

Emilio Doménech (The Cinefagos)

Conceptos como “mente”, “alma” y “religión” adquieren aquí la categoría de palabrotas tarantinianas. Conceptos desvirtuados, por su uso indiscriminado, hasta convertirse en meras poses. Plúmbeas ilusiones surgidas de la interacción entre la ensoñación y el acercamiento científico de la historia. Parece muy complicado, pero en realidad no es más que un viaje, aburrido y patoso, a ninguna parte. 

Víctor Esquirol (Naiz)

Controlado pero Lúcido, Desplechin traslada a Estados Unidos su discurso sobre los desequilibrios familiares y el psicoanálisis.

Carlos Reviriego (Caimán Cuadernos de Cine)