Revista Viajes
Es evidente que no considerar a Guy Ritchie como uno de los grandes genios actuales del cine es injusto. En esta sección de recomendaciones no podía faltar algún título suyo. Lock Stock es la ópera prima del ex de Madona. Hay gente que pensó que seria más conocido por eso, pero la calidad de sus títulos no deja lugar a dudas de que estamos ante un maestro, en la línea de Tarantino o los Cohen. Sus películas son divertidas, trazadas con ritmo, vertiginosas en las casualidades y desesperantes por momentos. Nos ocupa Lock Stock, pero no hay que dejar de ver Snatch (OBRA MAESTRA), Rockanrolla o Revolver (la menos conocida y más pensada por el director). Quizás su adaptación de Sherlock Holmes haya cogido el hilo comercial y solo aporte algo de frescura a la historia del famoso detective.
Jason Statham deja ya destellos de su magnífica clase en un papel que le viene medido. Hay que tomarse algo en el bar de Sting y echarse a temblar cuando uno tiene delante a Vinnie Jones, (ex jugador profesional de fútbol que debuta con solvencia convirtiéndose en actor fetiche de Guy). El filme tiene unos diálogos delirantes y situaciones embarazosas con algún que otro altercado. De banda sonora contundente, británica como no podía ser de otro modo. Destacar por supuesto a los compañeros de reparto de Statham, que si bien no han tenido tanto éxito ni saber hacer como él, si es cierto que cuajan una buena actuación.
Es una película que se disfruta mucho y que siempre la pones entre las que no deberías haber visto nunca para tener la oportunidad de verla de nuevo como si se tratara de la primera vez. Es una película muy recomendable para aquellos que creen en el azar como si de verdad definiera tantas cosas. No hay que perder de vista las casualidades de la vida, llamémosle como queramos, pero la amistad llegado el momento debe mostrarse. Montarse en el mismo barco y navegar persiguiendo un objetivo. La unión hará la fuerza y el destino el resto. Pero como dijo ese escritor indio, si existe la libertad no puede existir el destino.