Hemos llegado a Febrero y se ha abierto la época del bacalao skrei así que hay que aprovechar el momento y consumir este excelente producto de temporada.
El otro día en la pescadería tenían unos espléndidos ejemplares de este tipo de bacalao, eran tan grandes que no quise traerme uno entero así que le pedí a la pescadera que me cortara una cola y me sacara los lomos con piel.
Me gusta cocinar los lomos en sartén sobre la piel primero de forma que se churrusque un poco y después por el otro lado, durante menos tiempo, el pescado queda muy jugoso (siempre y cuando no nos pasemos en el tiempo al hacerlo).
Después quería hacerle una salsita y he pensado en probar una marinera, como la de las almejas a la marinera y bueno, que deciros, ha sido un éxito total.
INGREDIENTES:
Para el bacalao
Una cola de bacalao skrei a la que le hemos sacado los lomos con piel.
sal
un poco de aceite para la sartén
Para la salsa:
1 Cebolla
2 dientes de ajo
50-70 g de aceite de oliva virgen extra
1 cayena
2 cucharadas soperas de harina
150 g de vino blanco
100 g de agua
perejil fresco
MODO DE HACER
Vamos adelantando la salsa, para ello cortamos la cebolla en juliana y lo ponemos junto con el aceite y el ajo en filetes y la cayena en el recipiente dónde vayamos a hacer la salsa. Rehogamos bien y cuando esté pochado echamos las dos cucharadas soperas de harina, dejamos que se haga la harina removiendo y añadimos los líquidos dejando que se cocine durante unos 10-15 minutos. Echamos el perejil cortado fino y removemos.
Pintamos una sartén con aceite de oliva virgen extra y ponemos el bacalao por la parte que tiene la piel, lo dejamos para que se vaya haciendo (el tiempo dependerá del grosor del pescado), cuando la piel esté bien hecha dar la vuelta y dejar que el pescado se termine de hacer. Tiene que estar todo hecho (que no quede crudo el corazón) pero tiene que estar jugoso y con las lascas que se desprendan bien.
Se pone la salsa en una fuente y se colocan los lomos de bacalao ya hechos sobre la misma con la piel hacia arriba.
Yo lo he servido con unos pimientos rojos, amarillos y verdes salteados en la sartén. El resultado ha sido un plato equilibrado y exquisito. Os invito a probarlo.
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