Los 3 filtros del rumor
- Voy a contarte la última noticia que se comenta en Atenas sobre nuestro amigo Fulano.
- Antes de contármela, dime primero: ¿Lo averiguaste tú mismo, o sólo te lo han contado?
- Me lo han contado, pero lo dan por cierto.
- O sea, ¿que no puedes estar totalmente seguro porque no lo has podido averiguar tú mismo. Sólo piensas que es cierto ¿exacto?
- Efectivamente, así es.
- Y dime, ¿la transmisión de esta "noticia" va a beneficiar a nuestro amigo?
- No exactamente. De hecho, podría… perjudicarle.
- Otra cosa para terminar: ¿Escucharlo me resultará provechoso en algo, me aportará algo de lo que carezco ahora?
- La verdad es que no. No es más que una noticia.
- Sí. Y, por lo que entiendo, una noticia que ni puedes certificar que es cierta, ni va a beneficiar a nuestro amigo, ni me va a proporcionar algo útil. No me comentes esa noticia y permíteme que te recomiende que tú mismo la olvides.
“La cantidad de rumores inútiles que un hombre puede soportar es inversamente proporcional a su inteligencia.” Arthur Schopenhauer