Los adultos también pintamos

Como ya he ido diciendo en más de un post llevo algo más de un año con muchas cosas encima, es cierto que no tengo intención de quitarme ninguna porque todas o las necesito (lease, el curro y si me dan más horas mejor) o porque me hacen sentir mejor conmigo misma (el deporte por ejemplo), pero también es cierto que hay momentos en que creo que voy a estallar.
Hubo un tiempo en que el cansancio iba pasando factura en mi relación con los que me rodeaban, yo estaba muy irascible y acababa pagándolo o con las niñas o con su padre que es con quienes estaba al final del día. Y si soy sincera, no me gustaba nada cómo estaba en esos momentos así que decidí tomarme la vida un poco más "zen" y buscar actividades que pudiera hacer para relajarme y que fueran compatibles con las peques.
Hacía tiempo que veía por todos lados "mandalas" y no entendía en absoluto qué era eso, yo veía unos dibujos para colorear, veía que estaba de moda pero no conocía a nadie que los hiciera ni los utilizara para nada, hasta que un día buscando unos libros en Amazon apareció Mandalas para evitar el estrés y me dije ¿Por qué no lo pruebas? y lo compré (aprovechando el envío gratis por ser premium).

La primera sensación es que es un libro muy sencillo con frases de esas de autoayuda que no me van mucho pero en cuanto lo vieron mis hijas decidieron que querían pintar y nos pusimos a ello las tres después de comer (cuando les digo que no son horas de liarla sino de estar tranquilas y descansar). Ellas cogieron sus cuentos de pintar y yo el mío, en cosa de una hora no hubo gritos ni escándalos, yo me concentré en lo mío y mi mente se olvidó de dar vueltas a las cosas que le rondan continuamente.
Yo no sirvo para la meditación, dejar la mente en blanco me resulta imposible, pero concetrarme en un trabajo sencillo y ver sólo colores me dio resultado. Esto lo hablé con varias amigas y una de ellas que es pedagoga me comentó que ella lo usa mucho con sus alumnos cuando quiere que se relajen y se concentren, me dice que les pone como norma que ningún color se toque con otro igual y les calma y concentra.
Empecé a coger gustillo a esto de pintar un rato después de comer y he encontrado unos libros pensados para adultos que tengo que enseñároslos sí o sí...
Mi favorito sin duda "Esqueletos Graciosos. El País De La Paz". Son imágenes inspiradas en el día de los muertos mexicano, son unas láminas para mi gusto preciosas, con pequeños detalles que hacen que te tengas que concentrar en el dibujo y una cosa que a mí me ha gustado especialmente, las páginas son duras con lo que puedes pintar tanto con pinturas como con rotuladores y se pueden arrancar fácilmente sin estropear el libro.

Como lo de pintar es algo que hacemos las tres al mismo tiempo (si me pongo yo y ellas no de relajante tiene poco puesto que enseguida las iba a oir discutir) y la mayor viéndome a mí me decía que ella quería unos libros como los míos le cogí dos, uno de Mandalas para niños llamado "Mi Primer Libro De Mandalas" y otro que según lo vi supe que le iba a encantar: "Taller De La Calma. Dibujos Misteriosos" Este último es para niños a partir de 5 ó 6 años ya que requiere una mejor técnica y una mayor capacidad de atención a lo que están haciendo, son láminas de "pintar por números" pero con superficies más pequeñas que las que estábamos acostumbradas y con unos resultados del estilo a lo que a ella le gusta (bailarinas, mariposas,...). Con éste he descubierto además la colección "Taller de la calma" que tiene cosas preciosas que ya he añadido a mi lista de deseos para la próxima compra.

No sé si vosotras habéis probado esto de pintar todos juntos pero yo lo recomiendo absolutamente cuando necesitéis contar hasta diez demasiado a menudo o simplemente para disfrutar de un rato de paz.