Puesto porJCP on Feb 24, 2014 in Autores
Los bancos son los principales actores en el mercado de divisas. Mantienen una inestabilidad permanente de las tasas de cambio. Más del 95 % de los intercambios de divisas son de tipo especulativo. Una ínfima parte de las transacciones cotidianas en divisas concierne a inversiones, comercio de bienes y servicios ligados a la economía real, envíos de emigrantes… El volumen cotidiano de las transacciones en el mercado de divisas estaba en 2013 en alrededor de 5.300 millardos de dólares! Los bancos que disponen, como los fondos mutuos de inversión, de muy importantes liquideces, las usan y abusan de ellas empujando a determinadas monedas a la baja o al alza a fin de obtener ganancias con los diferenciales de tasas de cambio. Los bancos juegan igualmente de forma determinante con los derivados de cambio de divisas que pueden provocar pérdidas considerables, sin contar los perjuicios de la inestabilidad de las monedas para el conjunto de la sociedad. A partir de mayo de 2013, las monedas de los grandes países llamados emergentes (India, Brasil, Africa del Sur, Rusia, Turquía, Argentina…) han sido sometidas a ataques especulativos y han perdido en ciertos casos hasta el 20% de su valor . La tasa de cambio entre el dólar y el euro es también objeto de la especulación.
En cuarenta años, las transacciones en el mercado cambiario controlado por algunos grandes bancos se han multiplicado por 500
El mercado cambiario (mercado de intercambios de divisas ndt) constituye el compartimento del mercado financiero global que, al lado del mercado de derivados, ha registrado el mayor crecimiento. Entre 1970 y 2013, el volumen de las transacciones sobre las monedas se ha multiplicado por más de 500 (pasando de un poco más de 10 millardos a 5.300 millardos de dólares por día). Cuando, en teoría, la función principal de los mercados cambiarios es facilitar los intercambios comerciales internacionales, en 2013, el montante de las transacciones ligadas a los intercambios de mercancías no representaba ni siquiera el 2% del montante de las transacciones cotidianas en el mercado de cambios.
En 1979, era preciso el equivalente a 200 jornadas de actividad en los mercados cambiarios para alcanzar el volumen anual de las exportaciones mundiales. En 2013, 3,5 jornadas de actividad en los mercados de cambio bastan para alcanzar el volumen anual de las exportaciones mundiales de mercancías. Esto indica hasta qué punto las actividades de los mercados financieros están desconectadas de la economía productiva y del comercio de mercancías.
En 2013, entre solo cuatro bancos controlaban el 50% del mercado cambiario (Deutsche Bank, 15,2 %; Citigroup, 14,9 %; Barclays, 10,2 %; UBS, 10,1 %). Si se añade la parte de otros seis bancos (HSBC, JPMorgan, Royal Bank of Scotland, Crédit Suisse, Morgan Stanley, Bank of America), se alcanza el 80% del mercado . La mitad de los intercambios tiene lugar solo en el mercado de Londres.
Tras el escándalo del Libor, el del mercado de cambios
Cuando todavía las autoridades de control no podían considerar como resuelto el escándalo de la manipulación del Libor (los tipos de interés a los que los bancos se prestan el dinero), en 2013 estallaba un nuevo escándalo a propósito de la manipulación del mercado cambiario . Las autoridades de control de los mercados financieros de los Estados Unidos, Reino Unido, Unión Europea, Hong Kong y Suiza sospechan que al menos 15 grandes bancos han manipulado conjuntamente las tasas de cambio, incluyendo el mercado de cambio euro-dólar que, él solo, representa un volumen cotidiano de 1.300 millardos de dólares. Entre los bancos incriminados están Barclays, Citigroup, Deutsche Bank, Goldman Sachs, HSBC, JPMorgan, Morgan Stanley, Royal bank of Scotland, Standard Chartered y UBS. Otros 18 traders habrían sido suspendidos o despedidos en el marco de este escándalo, del que aún no se entrevén todas sus ramificaciones. Responsables de las autoridades británicas de control han declarado que la amplitud de los daños causados por las manipulaciones es al menos igual a la causada por la manipulación del Libor, que llevó al pago de multas por un montante de 6 millardos de dólares|. El colmo es que dirigentes del Banco de Inglaterra estarían implicados en la manipulación, igual que lo estuvieron en el escándalo del Libor. En abril de 2012, traders especializados en el mercado de cambios habrían informado de sus prácticas a algunos altos responsables del honorable Banco de Inglaterra que habrían dejado hacer . El dejar hacer, la complicidad, incluso la colusión entre dirigentes de los bancos y autoridades de control han comenzado a salir a la luz pública aunque las informaciones lleguen en cuentagotas y aparecen raramente en las portadas de los grandes medios.
A raíz de este escándalo, varios fondos de pensiones de los Estados Unidos han emprendido acciones judiciales en 2013-2014 contra 7 bancos (Barclays, Citigroup, Deutsche Bank, HSBC, JPMorgan, Royal Bank of Scotland y UBS) por las pérdidas sufridas como consecuencia de la manipulación del mercado cambiario a la que se han dedicado los banqueros. Los fondos de pensiones estadounidenses consideran que los bancos deberían entregarles 10 millardos de dólares como indemnización e intereses. Fondos de pensiones de los Países Bajos (entre ellos el PGGM, que es el más grande) y de otros países europeos estudian igualmente acciones ante la justicia.
La tasa Tobin está en el limbo
Hace ya más de cuarenta años, James Tobin, antiguo consejero económico de John F. Kennedy, proponía poner un grano de arena en las ruedas de la especulación internacional sobre las divisas . A pesar de todos los hermosos discursos de algunos jefes de estado, la plaga de la especulación sobre las monedas se ha seguido agravando. El lobby de los banqueros y demás inversores institucionales ha obtenido que ninguna traba venga a perturbar su actividad destinada a crear beneficios. Sin embargo, desde la época en que James Tobin hizo su propuesta, hemos visto que el volumen de las transacciones cotidianas en el mercado de divisas se ha multiplicado por 500…
La decisión de principio tomada en enero de 2013 por once gobiernos de la zona euro de imponer una tasa de un milésimo sobre las transacciones financieras es totalmente insuficiente, no afecta a las divisas y ni siquiera es seguro que entre rápidamente en vigor. Los bancos ejercen una fuerte presión para evitar y para limitar aún más su alcance . El gobierno francés muy íntimamente ligado a los bancos interviene activamente en favor de las demandas del lobby bancario|. No hay solución justa si el tema permanece en un contexto tan sesgado.
Por ello, ya es más que hora de frenar el engranaje de la especulación aplicando una verdadera tasa Tobin, primer paso hacia la prohibición completa de la especulación sobre las monedas.
Eric Toussaint
Fuente: Economía Crítica