Los bebés de zonas acomodadas tendrán mejor salud y calidad de vida

Un estudio realizado por la Oficina Nacional de Estadística del Reino Unido concluye que los bebés de zonas acomodadas tendrán mejor salud y calidad de vida, determinando que podrán vivir hasta los 70 años sin sufrir una enfermedad de carácter crónico asociado a la enfermedad. Este dato contrasta con los bebés nacidos en zonas más desfavorecidas, a los 52 años de edad empezarán a hacer acto de presencia las enfermedades crónicas.

La diferencia es bastante significativa, una niña nacida en una zona deprimida tiene hasta 20 años menos de esperanza de gozar de una buena salud, y aunque el estudio se realizó inicialmente con niñas, los investigadores explican que los datos son similares para los niños. Estos resultados no hacen más que delatar la desigualdad de la salud entre los habitantes del Reino Unido, algunas organizaciones y ONGs que luchan contra la pobreza en el país comparan la desigualdad de la salud en el Reino Unido con los niveles de salud que tienen en los países en vías de desarrollo.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud, la esperanza de vida saludable para los habitantes de Ruanda (África) se sitúa en 55 años para los hombres y 56 para las mujeres. Según los datos del Reino Unido, los habitantes de zonas más pobres tienen menor esperanza de vida saludable que los habitantes de Ruanda, hay que tener en cuenta que el Reino Unido es un país desarrollado y no tiene sentido que la esperanza de vida saludable sea menor.

Pero se pueden realizar más comparativas, en el caso de Rusia, los hombres pueden vivir sin problemas graves de salud hasta los 57 años, las mujeres hasta los 66. En Rumanía los hombres llegan hasta los 63 años y las mujeres hasta los 69, ante estas cifras, es lógico que se pregunte ¿qué ocurre en el Reino Unido?, ¿cómo existe tal diferencia en la salud de ricos y pobres? Las organizaciones que luchan contra la pobreza en el país consideran que la brecha económica está arrastrando a la salud de toda la población británica.

Las conclusiones de la Oficina Nacional de Estadística del país no dejan lugar a dudas, las áreas más pobres tienen una menor esperanza de vida saludable y las causas apuntadas son el paro, la dependencia de las prestaciones sociales, el tabaco, el consumo de drogas, el alcohol, etc. Es obvio que tener dinero posibilita el acceso a mejores servicios médicos, una mejor dieta y mejor calidad de vida en general, algo que se traduce en una mejora de la salud en el tiempo. Los resultados obtenidos se basan en la Encuesta Anual de Población de esta oficina en la que se analiza la calidad de vida de 320.000 personas.

Con este estudio se pone al descubierto que la pobreza y las privaciones que sufren los niños de zonas más desfavorecidas dañan su salud y además acortan su esperanza de vida, por ello se considera que los políticos deben actuar y pulir esas diferencias para poder brindar a todos los habitantes la oportunidad de poder gozar de una vida saludable más larga. De los datos se han sacado conclusiones como que el Reino Unido es uno de los países desarrollados con más desigualdad, los más pobres de ese país tienen peores condiciones de salud que los habitantes de un país como Ruanda.

Este curioso estudio, que hemos conocido aquí, llama bastante la atención, quizá merecería la pena ponerlo en marcha en nuestro país, después de varios años de recortes en prestaciones sociales, educación, sanidad y el incremento significativo de la pobreza infantil. ¿Qué esperanza de vida saludable tendrán los niños españoles?

Foto | Kris Mouser-Brown

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