Al momento de nacer los bebés se ven imposibilitados de respirar por la boca, solamente puede hacerlo por la nariz por eso es sumamente frecuente que se pongan muy molestos cuando se sienten congestionados ya que les cuesta mucho respirar con facilidad como lo resolvería una persona adulta.
Se trata de un pormenor del desarrollo natural, los recién nacidos tienen la boca tan pequeña que la lengua llena prácticamente la totalidad de su interior, algo que luego va cambiando a lo largo del tiempo, en el caso de los niños mayores o de los adultos, se tiene mayor espacio dentro de la boca.
Hacia los seis meses de vida de un niño los músculos que corresponden tanto a la lengua, como a la cara y al paladar del bebés se desarrollan y generan un mayor espacio lo que le permite al pequeño la posibilidad de poder respirar por la boca ya que se siente mucho más despejado que algunos pocos meses antes.
Cuando el niño nace la epiglotis, que es una estructura cartilaginosa que forma parte de la laringe, se encuentra muy cerca del paladar del pequeño lo ocasiona que virtualmente exista una selladura casi completa de los viaductos de aire que se encuentran dentro de la boca, por eso es imposible que el aire pueda circular por allí.
En los casos en los que una gripe o congestión bloquea la nariz el bebé se verá obligado a llorar con fuerza ya que solamente así puede generar la presión suficiente para poder ingresar aire mediante un espacio tan reducido hasta los pulmones. Cuando el niño se acerca al medio año de vida los músculos se desarrollan y la epiglotis se desplaza hacia abajo despegándose del paladar blando.
Es muy importante tener esto en cuenta ya que es lo que aumenta el riesgo de que el bebé se atore o atragante cuando se alimenta, ya sea con el pecho de su madre o con una mamadera, por eso hay que darle el tiempo suficiente y la comodidad necesaria para que pueda tragar y seguir respirando por la nariz sin dificultad durante todo el proceso de lactancia.
Vía | El Nacional
Foto | chimothy27
Enlace permanente:
Los bebés pequeños no pueden respirar por la boca