Revista Asia

Los ciervos de Nara

Por Pitiwo

Uno de los viajes más comunes que se hace cuando visitas Japón y especialmente si visitas la zona de Tokio es a la ciudad de Nara y disfrutar de sus templos y parques  y cómo no, la compañía de los famosos ciervos de Nara (sika).

Otro día hablaré de Nara y lo que puedes hacer allí pero hoy va dedicado a esos inofensivos animales que vienen humildemente a pedir comida…

Cuando vas al parque de Nara te encontrarás sí o sí con los ciervos y tienes dos opciones; pasar de ellos por completo por lo que seguramente ellos pasarán de ti o elegir comprar unas galletas para dárselas a los ciervos (shika sembei).

Si eliges la primera opción lo más probable es que no tengas ninguna anécdota más allá que intentar acercarte a ellos e intentar hacerte una foto, pero si por el contrario decides comprar comida, el abanico de posibles anécdotas para contar cuando vuelvas a casa se amplía.

Antes de que yo fuese a Japón ya había ido un amigo mío por lo que ya conocía la fama de estos ciervos. Mi amigo me invitó un día a su casa para comentarme cosas de Japón y qué podía hacer.

Yo no quería conocer mucho de Japón, la razón es que quería descubrir todo como si fuese un niño chico y que todo me sorprendiese. Por ejemplo, no había probado el sushi y no tenía ni idea y gracias a esto conocí  el wasabi de una forma muy curiosa.

Este amigo me convenció de que al menos viese el vídeo de Nara y sus ciervos, me comentó que su guía le había dicho que si compraban las galletas los ciervos se acercarían, entonces debías hacerle una reverencia y el ciervo te la devolvería a cambio de la galleta, según mi amigo te haría tres veces la reverencia pero yo no vi tantas reverencias pero bueno eso es lo que el guía le contó.

En el vídeo se veía a él comprando las galletas y un ciervo acercándose. Mi amigo levantó la galleta y el animal cumplió su parte haciendo la reverencia por lo que una vez realizada recibió su galleta.

El problema fue cuando vinieron tres ciervos y todos hicieron una reverencia, solo le pudo dar una galleta a uno de ellos y el resto pues no se lo tomó muy bien y se abalanzaron sobre mi amigo dándole mordiscos y empujones. No ocurrió nada grave pero según me comentó los mordisco no eran simples lametones.

El vídeo no muestra mucho más porque su pareja cortó la grabación a los pocos segundos pero me contó que tuvo que tirar el resto de las galletas y dejar que estos se las arreglaran entre ellos. Gracias a youtube he encontrado un vídeo que muestra el caracter oculto de estos ciervos.

Así que si quieres gastarle una broma a un amigo que te acompañe en tu viaje a Japón ya sabes lo que debes hacer. Aviso que no siempre funciona porque yo fui un día festivo pensando que iba a poder grabar alguno de esos ataques y los ciervos estaban tan cansados de galletas que por mucho que se la pusieras en el hocico, este ni se inmutaba.

De todos modos disfruté mucho con los pequeños que iban con su familia y no comprendían el porqué no comían con lo cual se lanzaban sobre los ciervos dispuestos a convencerles de que tenía que comer.

 


Volver a la Portada de Logo Paperblog

Dossiers Paperblog

Revistas