Cuando hay calima, una neblina envuelve el paisaje resaltando los contrastes de colores y ofreciendo imágenes únicas. En la dehesa de Puebla de Valles, tras una tarde por encima de los 37º, solo la brisa del anochecer hace el calor soportable (si se mueve una gota de aire, está en la dehesa). Por esto acudimos a pasear a este lugar…
En la dehesa, cada dia las imágenes son diferentes; este es otro de sus encantos. Y por ello sus atardeceres resultan mágicos.
Lar-ami, gerente de CR La Vereda de Puebla, entre cárcavas y olivos milenarios. Todo sobre Actualidad, Costumbres, Fiestas, Mundo Rural y Paisajes y Lugares de la Sierra Norte de Guadalajara.