Ya tenemos aquí el otoño, con su olor a calles mojadas, a castañas y a boniatos. Con él, las colecciones de productos para bebés giran hacia los matices castaños, anaranjados y morados.
Se evoca el paisaje rural con tonos de color tierra (marrones y verdes) y piedra (grises), en consonancia con la estación.
Bolso-cambiador Noname de Bebemon
Los bolsos de paseo deben ser algo más grandes que los usados en verano. Una mantita ligera o un gorrito de lana nunca irán mal si se van a pasar unas horas fuera de casa. Indispensable tapar la cabecita y las orejas del bebé. Escoge prendas de algodón para abrigar al peque; los sintéticos no absorberán el sudor y la lana puede provocar pequeñas irritaciones cutáneas.
El negro, que dicen combina con todo, permite conjuntar cualquier bolso con la silla de paseo. Una combinación de negro y colores otoñales es siempre un acierto.
El verde pistacho o lima es otro de los colores que sigue estando de moda. Son numerosos los complementos que apuestan por ese color y permite jugar con los mismos recuerdos al bosque, al musgo y a las hojas caídas.
Bolso-cambiador Noname de Bebemon
La puericultura pesada, como tronas y sillas de paseo, son menos estacionales, pero los colores chocolate, gris y negro siempre aportan elegancia y tradición.
Trona Tiko de Baby Monsters, color chocolate
Conjunto 3 en 1 silla de paseo Mariscal, de Baby Monsters
Los tonos chocolate y tostado tienen otra ventaja no tan evidente. Hacen sentirse más cómodos a los hombres, que de otro modo pueden ser recelosos a mostrarse en público por tanto tonos más femeninos o llamativos. El portabebé es el ejemplo más significativo, pero también los bolsos. Es más “natural” para los hombres llevar un color azul, negro o safari que uno rosa o estampado.
Bolso cambiador Urban XL de Bebemon
¡Feliz otoño – invierno! El primero del bebé y uno de los que, sin duda, no olvidarás nunca…
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