Álex Ferreira, músico prolífico donde los haya, acaba de publicar un nuevo trabajo, Dulus Dominicus, un EP con el que ha querido dar salida a cinco canciones que ha ido componiendo en los últimos meses. El dominicano, que llegó hace años a España con la idea de hacerse un hueco entre tanto y tanto escritor de canciones, publicó un par de interesantes EPs antes de dar un salto mortal con Un domingo cualquiera, su primer álbum de estudio, un trabajo con el que consiguió que su nombre corriera de boca en boca el curso pasado. Este cantautor de pelo rizado y voz dulzona, acostumbrado a desnudar emociones con una exquisita sensibilidad, vuelve a poner sobre la mesa una excelente colección de canciones entre las que destacan Sal o Dulus Dominicus (temazos redondos las dos), pero yo me he visto enganchado irremediablemente a Los Discos Daban Vueltas, un tema con el que consigo identificarme a más no poder. Entre los Ipods, Mp3, Itunes y demás avances hemos perdido el acto de escuchar un disco como un ritual sagrado. Apenas valoramos el diseño, pulsamos skip continuamente pasando de puntillas sobre las canciones que menos nos atraen y acabamos diseccionando los discos, mutilándolos, dejando de lado algo tan placentero como tumbarte a escuchar un buen LP desde que comienza hasta que termina de girar. Álex ha sabido expresar a la perfección esa especie de nostalgia que nos invade a muchos melómanos con un tema de naturaleza densa y tono grave que hoy quiero compartir con vosotros. Porque los disco, hace no mucho, daban vueltas, y en nuestras manos está que lo sigan haciendo...