Revista Salud y Bienestar
El
riesgo de malformaciones congénitas en los hijos aumentan
progresivamente con la gravedad del sobrepeso o la obesidad materna asi lo afirma un estudio realizado en Suecia y publicado en la revista medica The
British Medical Journal. Para el estudio, los investigadores utilizaron datos de más de 1,2
millones de nacimientos registrados en Suecia desde el 2001 al 2014. y tomaron como modelo para la clasificacion de la madre el
estándar de la Organización Mundial de la Salud (OMS), donde el IMC de
18,5-24,9 es normal, 25-29,9 sobrepeso, obesidad moderada 30 a 34,9,
de 35-39.9 severamente obesos, y algo más de 40 obesidad morbida. Se
reunieron información sobre malformaciones congénitas y el índice
de masa corporal de la madre en el momento del parto, y encontraron
que 43.500 niños estudiados presentaron malformaciónes mayores, como
defecto del corazón, de los órganos genitales, las extremidades, el
sistema urinario, el ojo, el aparato digestivo, fisuras faciales y
defectos del sistema nervioso de la columna vertebral o el cerebro.
Entre los hijos de madres con peso normal, así como los de bajo
peso, la tasa de malformaciones congénitas fue de alrededor del
3,4%,
esto se
elevó a 3,5% para los hijos de las mujeres con sobrepeso, un 3,8% en
obesas, un 4,2% en la categoría de obesidad severa y 4,7% para los
obesas mórbidos. El
riesgo fue mayor en los niños que en las niñas. El estudio tuvo en
cuenta otros posibles factores de riesgo como el tabaquismo materno o
beber, el estatus socioeconómico, la diabetes, el uso de drogas
antiepilépticas, y la deficiencia de vitaminas. Los hallazgos subrayan la importancia de tener un índice de masa corporal
materno en el rango normal antes del embarazo ya que la pérdida de
peso después de la concepción probablemente sería demasiado tarde,
porque la formación de los órganos en los embriones ocurre en las
primeras ocho semanas.