España se desangra lentamente. Los presupuestos con recortes más brutales desde que este país conoce la democracia se aprobarán sin oposición alguna ya que los españoles le dimos la mayoría absoluta al PP para que pudiera hacer y deshacer a su antojo. Sanidad y Educación serán los derechos básicos más mermados mientras que defensa, iglesia o la casa real no se verán muy afectados.
Ya que hablamos de la ‘caza‘ real no debemos olvidarnos de que nuestro rey, el de todos los españoles, pedía ejemplaridad en Navidad mientras hace unos días se iba a matar elefantes (animal en peligro de extinción) a 24.000 € el rifle. Como bien dice El País “todos nos merecemos unos días de asueto” y nuestro rey no iba a ser menos. Siempre nos quedará el consuelo de que no pegó ojo en Botsuana por eso de que el paro juvenil le quita el sueño. Qué campechano.
A todo esto va la Kirchner y cumple sus amenazas. Vamos, que nacionaliza YPF y le hace un expolio a Repsol en toda regla. Que no digo que sea por el bien de los argentinos pero que tampoco creo que esto vaya a cambiar la situación que vivimos los españoles. Eso sí, el Gobierno de Rajoy lo toma como una ofensa personal y un ataque a España. Ruedas de prensa conjuntas de dos ministros para defender a la multinacional petrolífera. Esas ruedas de prensa que no dieron para anunciar recortes de 10.000 millones de € en Sanidad y Educación.
Mientras tanto dicen y comentan que los españoles tienen un presidente del Gobierno que se llama Mariano Rajoy pero que nadie lo ve. Una vez, un grupo de periodistas se lo encontró en los pasillos del Senado y el bueno de Mariano, astutamente, se marchó por la puerta de atrás usando la técnica de Isabel Pantoja: “Dientes, dientes que es lo que les jode”. Menos mal que tenemos un presidente que no se iba a esconder y que iba a dar la cara. Menos mal.