"Nadie creía que fuera cierto, había rumores a los que nadie prestaba atención. Era imposible, eso fue lo que pensamos. Era imposible..."El virus que ha transformado el Viejo Mundo y la historia de la humanidad ha vuelto a mutar. Sus huéspedes han cobrado conciencia, han aprendido, y ahora han reclamado su lugar en el mundo. Son los humanos los que deben esconderse en Madrigueras bajo tierra, cazados como animales y enviados a campos de concentración y extracción.Esta no es la historia de alguien. Es la historia de un mundo oscuro, de un lugar cruel, de personas desesperadas. De personas a las que no puedes juzgar.Bienvenidos a la Granja Winter.Los ídolos de ceniza es la primera novela de un autor novel que decidió colgar su obra gratuitamente en Internet hará un tiempo. Se puso en contacto conmigo y yo decidí leerlo, o al menos intentarlo, así que aquí estoy hoy con la reseña; desde ya os anticipo que no ha sido una lectura que me haya encantado ni de lejos, tiene muchas carencias y he notado todas y cada una de ellas.
En primer lugar quisiera hablar de las cosas buenas que tiene. Lo más destacable es que es una historia con principio y con final, es decir, que aunque deja ciertas cosas a la imaginación y una segunda parte no sobraría del todo, ni falta ni sobra historia. Ojo, historia, porque la información es otro cantar. Además, es una lectura muy amena y de hecho si no fuera así es posible que no lo hubiera terminado de leer, tal y como me pasó con otro libro por esos días. Los capítulos están contados desde la perspectiva de distintos personajes, y cada uno de estos tiene una personalidad muy marcada que les da un poco de autonomía. Así, si una historia te gusta menos siempre vas con la idea de que dentro de nada tendrás otra que puede que te interese más. Y ya terminando las cosas buenas que tiene (en ocasiones me doy miedo hasta a mí), la historia tiene una base buenísima, es como un mundo post apocalíptico donde unos “seres” evolucionados del ser humano tienen a la gente en campos de concentración... el caso es que es una idea excelente. Ya cómo la lleva a cabo el autor es otro tema.
Ahora vienen las cosas malas. La primera de ellas es quizá la más importante en mi opinión, no sé, será que soy una persona muy exigente en estos temas pero por dios, las faltas. De un tiempo a esta parte, y sobre todo con estos libros autoeditados, me he vuelto bastante tolerante con la falta de tildes o los sino/si no, que pueden resultar difíciles. PERO. Una cosa es esa y otra cosa muy distinta es confundir entre haber/a ver, o poner haches donde no las hay, o viceversa (en ha habido, por ejemplo, o en vamos a casa). La verdad es que cada vez que veía una falta de esas me salía completamente de la lectura y me ponía a darme cabezazos contra la pared. De hecho empecé a leer otro libro para cuando las faltas me pusieran mala.
Dicho esto, también hay que decir que se nota mucho que es la primera novela del autor en cuanto a que me han faltado cosas faltan cosas, tales como por qué, o cómo, sucedió lo que sucedió. Así como le reconozco que sabe situar muy bien a cada personaje en su lugar y enlazar las distintas historias, la trama flojea en muchos otros sitios, y hace aguas por todas partes. Porque si creas una historia que en teoría se emplaza después de un acontecimiento tan grande como una guerra y una catástrofe, llámame loca, pero a lo mejor no estaría de más contar algo acerca de cómo se llegó hasta ese punto. Vale que no se sepa gran cosa pero al menos algo es necesario, aunque solo sea para que el autor tenga una mínima idea de dónde está y no se pierda. Le faltan descripciones, sobre todo de los hematófagos, porque no se crea la atmósfera opresiva que podría haber sido y no fue; pero en cambio debo reconocerlo al autor que puede hacerlo bien, o eso creo, porque los diálogos están muy bien metidos y nada suena a falso, además de que el final llega, como ya he comentado, cuando tiene que hacerlo y queda justo y necesario. Pero en fin, ¿lo recomiendo? Yo no. El caso es que está gratis, creo, así que si os apetece... allá vosotros.
Los ídolos de ceniza tenía mucho potencial, pero al final se quedó en el camino y desgraciadamente no me ha resultado una lectura agradable. Es ameno, sí, y cada una de sus historias enlaza en un final bastante correcto, pero eso no compensa sus carencias en la trama ni sus faltas de ortografía por doquier.