Alberto el jueves desafió por tuit diciendo que "la gestión de gobierno seguirá desarrollándose del modo que yo estime conveniente".
Alejandro Borensztein
El viernes el país se enteró de que lo que él estimaba conveniente era justo lo que quería Cristina. Alcoyana alcoyana.
"Hoy vas a entrar en mi pasado, hoy nuevas sendas tomaremos, que grande ha sido nuestro amor y sin embargo ay, mirá lo que quedó".
Así termina el glorioso tango "Los mareados" de Cobián y Cadícamo que inmortaliza el adiós de una pareja embriagada. Dos semejantes que se separan en una última y romántica noche bajo los efectos del alcohol. Nada que ver con Cristina y Alberto.
En principio, no son dos semejantes porque hay uno que está completamente subordinado a la otra, tampoco se separaron porque él aceptó seguir sometiéndose a ella y no toman alcohol porque si Cristina ve una botella se la parte por la cabeza (de hecho es lo que hizo esta semana). Lo único que tienen en común con la pareja del tango es que los dos están completamente en pedo. Al menos eso demostraron esta semana delante de todos los argentinos y del mundo.
En este contexto tan patético rescatemos la buena noticia: las empresas Rigolleau y Durax se han comprometido a reponer, de manera completamente gratuita, toda la vajilla que esta semana se destrozó en el Instituto Patria. Platos, vasos, fuentes, copas, floreros, portarretratos, ceniceros y demás serán repuestos a la brevedad.
Frávega y Musimundo van a reemplazar televisores, celulares, cafeteras, freidoras, plancha y demás artefactos arruinados durante la furia vicepresidencial. Cabe también felicitar a la gente de Tramontina porque los incidentes demostraron la efectividad de todos sus productos ya sea sobre telas, sillones, cortinas, mascotas, etc.
Por su parte, las empresas Farmacity y Dr. Ahorro se suman al compromiso de colaborar con la normalización institucional y van a entregar semanalmente en el Instituto Patria las cajas necesarias de Rivotril, Clonagin, Valium, Lexotanil, Alplax, Zoloft, Prozac y Halopidol 900mg.
Dato clave confirmado por el equipo médico oficial: escribir en un mismo párrafo más de 10 veces la palabra etcétera (en el caso de la carta de la Vicepresidenta fueron 18 consecutivas) cancela inmediatamente todo certificado de apto médico que haya sido expedido en el pasado.
Finalmente, sepan disculpar los vecinos del Instituto Patria por las molestias ocasionadas, los gritos desaforados y el lenguaje soez. Para tranquilidad de todos, el gato gris que el martes a la noche salió revoleado por la ventana del segundo piso está con vida. No tuvo la misma suerte el caniche negro que solían ver paseando por la cuadra.
Aclarado todo esto, no perdamos de vista lo más importante que ocurrió esta semana y que también es una buena noticia entre tanta pálida. La oposición le dio una paliza electoral al Gobierno y sin embargo no tiraron globos, no bailaron sobre el escenario y no intentaron hacer ninguna coreografía.
Imagínese, amigo lector, lo que hubiéramos sentido si después de semejante triunfo, en lugar de una actitud seria y comprometida ante la gravedad de la situación, hubiésemos visto a López Murphy arrojar el saco al público, desatarse la corbata, y empezar a caminar para atrás como Michael Jackson. Por suerte nada de eso ocurrió. En otras palabras, todo parece indicar que JUNTOS aprendió la lección y que, si la historia les da una nueva oportunidad, esta vez se dedicarán a hacer política en serio y no van a volver a boludear con el marketing y esas cosas. Lo hubieran entendido antes y nos ahorrábamos este quilombo. Hay esperanza. Si vuelven, sin dudas volverán mejores.
En cambio, los que bailaron fueron Máximo Kirchner, Tolosa Paz, Axel Kicillof y Daniel Gollán quienes el domingo pasado a las 18:00 horas, creyendo que habían ganado la elección, salieron al escenario a sacudirse como adolescentes. A pesar del 45% de pobres, del 50% inflación y, sobre todo, de los 115.000 muertos, los cuatro muñecos saltaban eufóricos al ritmo del tema "Reyes de la Noche" de Guasones.
Curiosamente, Cristina dijo en su carta que ella sabía que iban a perder. La pregunta en ese caso sería: si sabía que iban a perder, ¿por qué no le avisó al hijo y les evitaba la payasada que hicieron el domingo en vivo, en directo, en HD y para toda la Argentina?
Lamentablemente para el kirchnerismo, la imagen de Máximo, Tolosa, Axel y Gollán bailando en el medio de la mayor tragedia de nuestra historia, quedó registrada para la posteridad. La próxima vez que pierdan no le van a poder echar la culpa solamente a Guzmán. Es obvio que el desastre socioeconómico en el que estamos sumergidos les jugó en contra pero la vacunación VIP, las fiestitas en Olivos, el apoyo a Cuba, Venezuela y Nicaragua, la suelta de presos, los desopilantes sketches de Alberto y Axel, el rol estelar de Ginés y sobre todo el mamaracho que hicieron con el plan de vacunación, colaboró y mucho. Cuando busquen razones para una próxima derrota, no se olviden de sumar el bailecito de Tolosa y Gollán, las cartitas de Cristina y el show que estamos viviendo.
La oposición la tiene servida. Cuando votés a Tolosa y Gollán o a Santoro y Marziotta, no estarás eligiendo entre Alberto y Cristina, estarás votando este quilombo completo. Incluida Fernanda Vallejos (no sé que esperan para llevarla a la mesa de Mirtha).
Alberto el jueves desafió por tuit diciendo que "la gestión de gobierno seguirá desarrollándose del modo que yo estime conveniente". El viernes el país se enteró de que lo que él estimaba conveniente era justo lo que quería Cristina. Alcoyana alcoyana.
El nuevo gabinete cumple con una de las 20 verdades kirchneristas tantas veces repetida en esta columna: "cada vez que el kirchnerismo raja a uno o a una siempre será reemplazado por algo peor". Dicho y hecho.
Esta vez hay una explicación. Nadie quería agarrar. Cualquiera de los gobernadores convocados tenía que elegir entre una vida tranquila rodeado de bellos paisajes y buena gente o venir a la Capital para bancarse que todas las mañanas Cristina lo putee de arriba a abajo y que todas las tardes tenga que pasar un ratito por la Rosada a prestarle la oreja al "presidente" para que no se deprima. El único que aceptó fue Manzur. Se ve que en Tucumán la cosa está peor que en Argentina.
Rajaron a Solá, el primer canciller argentino que no habla una sola palabra en inglés y pusieron a Cafiero, el segundo canciller argentino que no habla una sola palabra en inglés y cuya principal experiencia internacional es haber alquilado entre seis amigos un derpa en Florianópolis.
La vuelta de Aníbal Fernández como ministro de seguridad ya ha generado tantos memes y chistes que hoy domingo no queda nada por agregar. Solo cabe recordar que los ex ministros de este gobierno Felipe Solá y Daniel Arroyo se presentaron en 2015 como candidatos a gobernador y vice por la PBA (contra Vidal y contra Aníbal). En el spot más recordado Arroyo le habla a Solá sobre la delincuencia y las drogas. Solá mira a cámara y dice "cuando apagamos la luz y nos quedamos a solas, pensamos en serio. Imaginen a Aníbal Fernández conduciendo la provincia de Buenos Aires". Ambos iban en la boleta de Sergio Massa presidente y el jefe de campaña era Alberto Fernández. Todo posta. Creer o reventar.
Momento difícil para el país. Es tiempo de bajar los decibeles y volver a las fuentes. Recuperar la tranquilidad, rescatar los valores esenciales y recurrir a los pensadores más lúcidos de nuestra historia. Abundan los ejemplos. Llevamos estampados en nuestra memoria las máximas de nuestros próceres. Frases que nos iluminan, no solo para ver el futuro sino también para entender el presente. Recordemos una: "Los mexicanos salieron de los indios, los brasileños salieron de la selva pero nosotros los argentinos llegamos de los barcos", Alberto Fernández, 9/6/2021. Y es el Presidente de la Nación. Lujos que nos damos.
"...Esta noche amiga mía, el alcohol nos ha embriagado, que me importa que se rían, que nos llame los mareados".
Origen: CLARIN