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Líder de Hamás Yahya Al-Sanwar Hamás quiere llegar a un acuerdo de alto el fuego; al menos, ese es el mensaje que los mediadores egipcios y qataríes transmitieron a los funcionarios israelíes en los últimos días antes de una cumbre crucial a finales de esta semana, dijo una fuente israelí familiarizada con el asunto.
Pero sigue siendo una duda si el primer ministro israelí quiere eso.
Dos fuentes israelíes dijeron que los aliados de Netanyahu dijeron a periodistas y otros funcionarios del gobierno que el primer ministro israelí está listo para concluir un acuerdo, independientemente de su impacto en su coalición gobernante. Pero el establishment de seguridad israelí sigue siendo más escéptico sobre la voluntad de Netanyahu de cerrar un acuerdo a la luz de la feroz oposición de los ministros de extrema derecha de su coalición.
Una fuente israelí dijo: «Nadie sabe lo que quiere Bibi», refiriéndose a Netanyahu por su apodo.
Está claro que Netanyahu enfrentará esta semana una montaña de presión por parte de Estados Unidos para aceptar un alto el fuego y liberar a los rehenes.
La fuente israelí dijo que los funcionarios estadounidenses dejaron claro a sus homólogos israelíes que creen que ha llegado el momento de alcanzar un acuerdo de alto el fuego para evitar una guerra regional más amplia.
El Foro para Familiares de Prisioneros y Personas Desaparecidas, una voz fuerte en Israel, pidió a Israel y Hamás que finalicen el acuerdo sobre los prisioneros y el alto el fuego.
El foro dijo en un comunicado el jueves: «El acuerdo es la única manera de devolver a todos los rehenes a sus hogares. El tiempo se acaba. Los rehenes no tienen nada que salvar. ¡El acuerdo debe firmarse ahora!».
Mientras tanto, los socios de la coalición de Netanyahu han dejado claro que no quieren que Israel llegue a un acuerdo con Hamás.
El ministro de Finanzas israelí, Bezalel Smotrich, describió el viernes el acuerdo de alto el fuego propuesto como un «acuerdo de rendición».Escribir en la plataforma de redes sociales X Dijo: «Pido al Primer Ministro que no caiga en esta trampa y que no acepte ningún cambio, ni siquiera el más mínimo, de las líneas rojas que estableció recientemente, que también son muy problemáticas».
El portavoz de seguridad nacional de la Casa Blanca, John Kirby, criticó los comentarios de Smotrich y dijo: «Sus argumentos son completamente erróneos».
Pero el futuro político de Netanyahu depende en gran medida de sus socios de coalición, muchos de los cuales ya han amenazado con retirarse del gobierno y provocar su colapso si acepta el acuerdo.
La Knesset (Parlamento israelí) se encuentra actualmente suspendida por su receso de verano, lo que haría difícil -aunque no imposible- que Smotrich y el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, colapsen el actual gobierno. Fuentes israelíes indicaron que Netanyahu podría convocar elecciones si se alcanza un acuerdo de alto el fuego, lo que le permitiría controlar el momento de dichas elecciones.
Los mediadores tienen previsto reunirse con los equipos negociadores de Israel y Hamás en El Cairo o Doha la próxima semana. Pero la fuente israelí dijo que las negociaciones ya están en marcha con delegaciones técnicas trabajando «las 24 horas del día» para discutir detalles clave antes de la reunión del jueves.
Las conversaciones llegan en un momento muy tenso en Oriente Medio. Los asesinatos de figuras prominentes en el Líbano e Irán en las últimas semanas han generado temores de reacciones de represalia que podrían conducir a un conflicto más amplio.
La semana pasada, Israel mató a Fouad Shukr, el máximo comandante militar de Hezbolá, el grupo armado libanés respaldado por Irán. Al día siguiente, se cree ampliamente que Israel asesinó al líder político de Hamás, Ismail Haniyeh, en Teherán, en lo que se considera una gran vergüenza para la Guardia Revolucionaria Iraní, que acogía a Haniyeh.
Israel no ha confirmado ni negado su participación en este incidente.
Hay indicios de que Irán reconsiderará el alcance y el momento de su respuesta a Israel si se alcanza un alto el fuego en Gaza, una posibilidad que ha ejercido presión adicional sobre Israel para llegar a un acuerdo a fin de evitar el riesgo de una guerra regional total. .
Sinwar, el líder de Hamás en Gaza a quien Israel acusa de ser uno de los autores intelectuales del mortal ataque terrorista del 7 de octubre, fue nombrado nuevo jefe de la oficina política del grupo tras el asesinato de Haniyeh.
Sinwar no ha aparecido en público desde el 7 de octubre y se cree que se esconde en túneles excavados bajo Gaza. Haniyeh jugó un papel importante en las conversaciones de alto el fuego, pero el papel de Sinwar fue más limitado, dada la dificultad de comunicarse con el mundo exterior.
Las conversaciones se producen después de un ataque israelí a una escuela y una mezquita que mató a decenas de personas y provocó indignación internacional. Israel dijo que tenía como objetivo un centro de mando de Hamas y mató a varios combatientes.
La vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris, candidata presidencial demócrata, dijo el sábado que «demasiados» civiles habían sido asesinados en Gaza y añadió que el acuerdo «debe concretarse ahora».