Los medicamentos para tratar el TDAH en los niños provocan problemas de sueño

Una investigación llevada a cabo por expertos de la Universidad de Nebraska (Estados Unidos), concluye que los medicamentos para tratar el TDAH (trastorno de hiperactividad y déficit de atención) provocan en algunos niños problemas de sueño, los pequeños no pueden conciliar el sueño y se mantienen despiertos por la noche, algo que evidentemente no les beneficia.

Según los investigadores, este es uno de los efectos secundarios que han encontrado en fármacos como Concerta, Adderall o Ritalin. Este problema no se detectaba por una simple razón, es habitual que los niños con trastorno de hiperactividad y déficit de atención tengan problemas de sueño independientemente del tratamiento, además, algunos investigadores aseguraban que estos fármacos podían contribuir a mejorar el sueño de estos niños, algo que la nueva investigación refuta.
El nuevo análisis realizado pone al descubierto que en realidad ocurre lo contrario, según los datos de la investigación la administración de los fármacos incrementaba los problemas de sueño. Por ejemplo, en una de las pruebas se administró a un grupo de niños con TDAH una forma genérica de Ritalin, a otro grupo se le administró un placebo, los resultados mostraron que el primer grupo durmió una media de 20 minutos menos en comparación con los niños que habían recibido el placebo.

Los expertos advierten que con estos resultados no se pretende invitar a los padres a se abandone el tratamiento que tienen prescrito sus hijos, pero sí tienen como cometido animar a los padres a que hablen con los especialistas médicos para averiguar si el tratamiento que reciben sus hijos les está causando problemas de sueño, de este modo se podría cambiar de medicamento, intentar ajustar la dosis o cambiar la hora en la que se administra el fármaco, posibles soluciones que reducirían el impacto de los fármacos en el sueño infantil.

Los expertos constataron que la cantidad de fármaco que se tomaba durante el día era condicionante del tiempo en el que el niño tardaba en quedarse dormido, por ello consideran que quizá habría que administrar un medicamento con una fórmula de liberación prolongada en las primeras horas del día. Por otro lado, también se considera necesario que los padres reciban consejos que ayuden a crear buenos hábitos de sueño en los niños con TDAH, como por ejemplo seguir unas rutinas horarias para irse a dormir, evitar que tengan acceso a cualquier dispositivo electrónico, ducharse antes de dormir, etc., básicamente las mismas pautas que se emplean con los niños que no sufren este trastorno, aunque no siempre se cumplen.

Dormir bien es muy importante para que los niños puedan tener un desarrollo cerebral saludable y puedan afrontar el día con energía y contar con las máximas capacidades. Por último, los expertos recuerdan que la medicación no afecta a todos los niños, un pequeño porcentaje sufre esos efectos secundarios que se pueden evitar con las fórmulas antes citadas. Los fármacos para tratar el TDAH no deben ser abandonados, ya que si se sopesa los pros y los contras, se puede constatar que ofrecen más beneficios que complicaciones.

Sin duda, es un estudio interesante que puede servir para que los padres de los niños de nuestro país que sufren este trastorno y tienen problemas de sueño, acudan al especialista para que determine el origen de los problemas de sueño y si los fármacos incrementan un problema que de por sí ya es habitual. Podéis conocer todos los detalles del estudio a través de este artículo publicado en la revista científica Pediatrics.

Foto | Tony Webster

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