Venezuela es un país que desde principios de siglo ha desarrollado un protagonismo en la región latinoamericana y en la política internacional que ha llevado a que esta nación de 30 millones de habitantes sea citada con regularidad tanto en entornos académicos como en ambientes más distendidos. Es habitual observar como Venezuela se utiliza como arma arrojadiza en los acalorados debates televisivos, es prácticamente una norma no escrita citar en estos espacios mediáticos los supuestos atentados contra los derechos humanos y las libertades individuales que el gobierno del Partido Socialista Unificado de Venezuela comete contra su propia población. Realmente sobre este país tropical se ha dicho de todo y se pueden realizar cualquier tipo de juicios de valor sin veracidad o reflexión previa. Lo más sangrante es que estos consensos creados a lo largo de este principio de siglo se repiten hasta la saciedad en ambientes muy distintos, es curioso y entristecedor que un profesor de una universidad de Ciencias Sociales utilice los mismos argumentos que dos personas conversando en un bar o que Bertín Osborne en un plató de televisión. Este hecho evidencia que los consensos sobre Venezuela reproducidos por los medios de comunicación han calado hondo en el conjunto de la sociedad y esta no se ha parado a reflexionar sobre la autenticidad de estos. Estos acuerdos colectivos tienen una línea común y pueden ir desde “El gobierno de Maduro es un sistema dictatorial que encarcela a opositores” o “En Venezuela los medios de comunicación están controlados por el gobierno y práctica la censura” hasta “Chávez quiere prohibir los Simpson y la Coca Cola”. Este artículo tratará de arrojar luz sobre el controvertido tema de los medios de comunicación y el trato que tiene el gobierno con estos.
Si uno pone en su buscador de internet la frase “medios de comunicación en Venezuela” rápidamente le aparecen numerosos enlaces de asociaciones de prensa con cierta legitimidad internacional presentando informes de la dramática situación que vive la prensa en este polémico país. Entidades como Reporteros sin Fronteras en un informe realizado en 2013 afirma que en Venezuela casi la gran totalidad de los medios de comunicación están dominados por el gobierno bolivariano, a su vez Human Right en un amplio documento elaborado en 2014 afirma que “durante el gobierno del presidente Chávez y ahora durante la presidencia de Nicolás Maduro, la acumulación de poder en la rama ejecutiva y la erosión de las garantías sobre los derechos humanos han permitido al gobierno intimidar, censurar y perseguir a sus críticos” e informó “que los medios de radiodifusión pueden ser censurados si critican al gobierno” . Al observar estos informes uno puede llegar a la conclusión de que el gobierno de Venezuela realiza unas prácticas dictatoriales en referencia a los medios, unas prácticas que según los informes se acercan mucho a las utilizadas por exdictaduras latinoamericanas como la Chilena, Argentina o Uruguay.
Pero ¿Qué hay de verdad en estos informes? Para comprobar la veracidad de dichas afirmaciones lo más conveniente es analizar quienes son los dueños de la información en Venezuela a través del reparto de medios, evaluar las audiencias para comprobar que grado de influencia tiene cada medio, examinar la existencia de conglomerados mediático y qué relación tienen con el poder, y por último tratar casos concretos que han generado polémica tanto en América Latina como en Europa.
Este artículo plantea una visión distinta con la intención de desmentir con datos y argumentos contrastados los consensos que con intención deslegitimadora se crean sobre este país que siempre estará en tela de juicio, no porque a Occidente les importe mucho como viven los ciudadanos venezolanos, si no por el oro negro que durante años controlaron y que ahora tienen que pagar religiosamente.
1-Reparto de medios: TV/Prensa escrita/ Radio
En la siguiente imagen se analiza el origen privado o público de los principales medios de comunicación que operan en el país, si bien es cierto que en la imagen no aparecen el 100% de las entidades de comunicación venezolanas ya que son muy numerosas, si aparecen las más utilizadas y por lo tanto las que mayor repercusión e influencia poseen. Se da por hecho que los medios públicos tienen el control del gobierno y los medios privados escapan al control estatal:
Como se puede observar de las 10 cadenas de televisión más vistas e importantes del país, solo 4 son de dominio público mientras que 6 son de origen privado. Es preciso destacar que la cadena TVes corresponde a la antigua cadena privada RCTV nacionalizada en el año 2008 por parte del gobierno de Hugo Chávez.
1.1 Niveles de audiencias
Para comprobar el nivel de influencia que un medio de comunicación tiene sobre la población es preciso ver el nivel de audiencia. Si se observa la audiencia por canal se puede evidenciar que las televisiones con más seguimiento por parte de los venezolanos son las dos cadenas privadas que en general han mostrado un acercamiento hacía postulados de la oposición, y por otro lado la TV de pago, que escapa al control del gobierno. Las cadenas de TV más ligadas al oficialismo como son VTV, Telesur y TVES no superan ni un 5% del share total, lo que da pistas sobre la influencia de estos medios.
(Fuente AGB Nielsen)
1.2 Avance de la Televisión privada
Por otro lado la televisión por cable está sufriendo un avance significativo de usuarios y audiencia, llegando a niveles de más del 65% de los venezolanos que disfrutan de este servicio. En 2012 el 65% de los venezolanos optan por la TV de pago mientras que el 35% por la emisión en abierto, esta disminución evidencia que el control del gobierno en los medios de comunicación cada vez es menor, ya que a través de la televisión por cable cualquier usuario tiene vía libre para ver canales de todo el mundo, incluido los canales americanos fervientemente críticos con el gobierno venezolano como la FOX.
(Fuente AGB Nielsen)
En lo que se refiere a la prensa escrita, la proporción es menos igualitaria, de los 6 periódicos más importantes solo 1 es de dominio estatal, el resto pertenecen a entidades privadas y conglomerados mediáticos, incluso el diario “El Universal” pertenece a una empresa española denominada “Espalística” que es dirigida por el empresario español Jesus Abreu. Se concluye que la prensa escrita está controlada por el 84% de medios de origen privado que escapan al control público.
En cuanto a las radios el panorama no es muy distinto a los otros sectores mediáticos, las radios privadas suman el 97,2% del total de las radios más influyentes e importantes, siendo únicamente el 3.8% las radios que están en manos púbicas.
Sumando el total de los medios analizados, el 80.4% de los medios de comunicación en Venezuela no solo no están en manos del gobierno, sino que son medios privados la gran mayoría de ellos abiertamente opositores.
2-El caso de Radio Caracas TV
Uno de los capítulos más polémicos de la TV venezolana es el cierre de Radio Caracas televisión. En 2007 el gobierno de Hugo Chávez anunciaba que no iba a renovar la concesión al medio de comunicación RCTV por su manipulación durante el golpe de estado que sufre el gobierno Bolivariano en 2002, haciendo hincapié en la manipulación del suceso del puente Yaguno. Hay que recalcar que el gobierno de haber querido cerrar el canal no tendría que haber esperado 5 años desde que sucede el golpe hasta la finalización de la licencia. Una vez llegado el último día en que el medio de comunicación tenía la capacidad de emitir su programación, el gobierno requisó todos los materiales y se fundó la televisión pública TVes, lo que se puede considerar que RCTV no fue cerrada si no nacionalizada. Además RCTV siguió su emisión en la televisión por cable, utilizada por la gran mayoría de los venezolanos. Este suceso fue tratado en España como un atentado a la libertad de expresión y muchos periodistas pusieron el grito en el cielo ante este hecho, pero nunca se explicaron ni los motivos de la nacionalización ni la continuidad de la cadena en emisión privada.
3 -Conglomerados Mediáticos: Cadena Capriles/ Grupo Ultimas noticias.
La gran mayoría de los medios de comunicación están dominados por lo que antiguamente y hasta mayo del 2013 se conocía como “Cadena Capriles, en la actualidad este conglomerado empresarial pasó a denominarse “Grupo Ultimas Noticias”. Este grupo mediático fue fundado por una familia judía en 1941 siendo en 1948 cuando Miguel Ángel Capriles Ayala se hizo propietario de la totalidad del grupo empresarial. En 1958 crea uno de los periódicos más importantes en la actualidad, El Mundo, que sería de circulación vespertina. Según Michael Coppedge (profesor de Ciencia Política en la Universidad de Notre Dame), en 1968 un acuerdo entre Rafael Caldera (COPEI) y el grupo mediático tendría como resultado que Miguel Ángel Capriles obtuviera un escaño en el senado y el derecho a decidir a once candidatos al congreso, a cambio el grupo empresarial debería dar una cobertura favorable a la campaña a las presidenciales de 1968. Capriles fue elegido para el Senado de Venezuela en 1968 en la lista del partido de COPEI y siete Capriles nominados fueron elegidos a la Cámara de Diputados de Venezuela, incluyendo el director de El Mundo, Pedro Ramón Romero. A su vez el hermano de Capriles Ayala periodista e historiador Carlos Capriles Ayala, fue nombrado embajador en España.
En la actualidad las relaciones económico-políticas se mantienen, el candidato y actual jefe de la oposición Henrique Capriles Radonski es descendiente de 3º generación de Miguel Ángel Capriles Arcaya fundador del grupo empresarial. De hecho que se cambiara el nombre del grupo en Mayo del 2013 no es casualidad, ya que se producía dos semanas después de que Henrique Capriles casi ganase las elecciones generales contra su rival Nicolás Maduro. Que el jefe de la oposición. El cambio del nombre del grupo y su parentesco familiar da muchas pistas sobre las relaciones entre la oposición, los medios y los posibles intereses económicos de ambos, y para ganar votos hay que eliminar las pistas.
4-Ley de responsabilidad social en radio y televisión: ¿Herramienta legislativa para censurar?
Desde Europa se ha planteado que esta ley es la herramienta que utiliza el gobierno para llevar a cabo la censura y las prácticas totalitarias, incluso se llegó a argumentar que esta ley intentaba censurar la célebre serie de TV americana “Los Simpsons” cuando realmente la ajustaba a un horario adecuado. En realidad esta ley es muy similar a la ley española que regula el horario infantil y el máximo de publicidad por hora. El objetivo es el de establecer “la responsabilidad social de las normas y principios constitucionales, de la legislación para la protección integral de los niños, niñas y adolescentes, la educación, la seguridad social, la libre competencia y la Ley Orgánica de Telecomunicaciones”. Estas normas limitan las escenas de sexo en las telenovelas y las escenas violentas en horario considerado como infantil, a su vez establece limitaciones publicitarias, es decir una ley como la que podría tener cualquier otro país en Europa o el resto del mundo.
Este análisis desmiente el informe de Reporteros sin fronteras y los consensos creados en torno a los medios en Venezuela, esta información no es ni por asomo algo oscuro y difícil de encontrar, con visitar la página web de cada medio es más que suficiente para encontrar todo el material. Esta valoración jamás la verás en un mass media ya que supondría una contradicción entre la veracidad informativa y los intereses económicos de los accionistas dueños de los medios de comunicación.