Sus características son las siguientes (según se recoge en el propio informe):
- Tienen estructura de curso, ya que cuentan con unos objetivos e hitos dentro de un conjunto de áreas de aprendizaje o temas concretos.
- Están disponibles en línea, ya que se desarrollan en entornos virtuales y permiten la conexión en lugares remotos a través de Internet.
- Su alcance es masivo, ya que las plataformas tecnológicas mediante las que son impartidos permiten el acceso a un gran número de alumnos.
- Su contenido es abierto, dando acceso su seguimiento a cualquier persona. En cuanto a la propiedad y tipo de licencia de los contenidos para su reutilización no existe un criterio homogéneo y dependen de cada plataforma.
Muchos somos los que ya hemos participado con mayor o menor intensidad en un MOOC, pero tanto para aquellos/as con cierta experiencia como para los que aún no han tenido la oportunidad de experimentar la formación a través de un MOOC, este informe aporta luz sobre su nacimiento, generalización y, lo que nos parece más relevante, los escenarios futuros que se pueden dar en la educación de los próximos años por la irrupción de esta nueva forma de entender y experimentar el aprendizaje. Desde principios del siglo XX hasta la actualidad nuestras sociedades han vivido un proceso de democratización de la educación con unos impactos muy positivos para el desarrollo de la ciudadanía y de los países. Sin embargo el diseño del sistema de Educación Superior responde a una sociedad del pleno empleo que hace tiempo que entró en crisis, lo que nos ha llevado a hablar de una juventud sobrecualificada. En realidad no se trata tanto de que nuestros jóvenes tengan demasiada formación (¡cómo podríamos afirmar que mucha formación es negativa!) sino que el problema reside en que la formación está desligada de las necesidades socioproductivas actuales y el mercado laboral no puede absorber a nuestros jóvenes titulados. En este contexto tal y como se afirma en este informe, la educación actual está sometida a varios desafíos como son la personalización, la necesidad de una mayor flexibilidad y las restricciones económicas. “Todo esto nos hace pensar en la necesidad de un cambio. Este cambio tiene sus raíces en dos tipos de aspectos: uno es la evolución tecnológica, que permite en la actualidad hacer cosas que antes no podían ser imaginadas: el otro es la evolución de los modelos pedagógicos”. El papel jugado por evolución tecnológica es claro, el desarrollo de Internet y las redes sociales han favorecido el desarrollo de nuevos canales de comunicación entre las personas, consolidándose como una herramienta de cooperación como ya hemos observado anteriormente en el campo de la Innovación Social. Una realidad a la que las instituciones educativas no son ajenas: “ Un estudio llevado a cabo por la Universidad de Massachusetts muestra que el 100% de las Universidades encuestadas usa los medios sociales para algún propósito, el video y los blogs son las aplicaciones sociales más comúnmente utilizadas para la instrucción”. Sin embargo la mayoría del profesorado mantiene reparos debido a cuestiones de privacidad relativas tanto al alumnado como a ellos/as mismos/as. Y la potencia de los nuevos desarrollos tecnológicos como el Big Data son más que constatados: “Las técnicas de Big Data permitirán conocer mejor al alumno: cuándo se conecta, desde dónde se conecta, qué tipo de contenidos prefiere, qué materias presentan mayor dificultad, qué errores comete más comúnmente, cuál es su estilo de aprendizaje, etc. Toda esta información tiene gran valor para convertir al usuario en el centro de todo el sistema educativo alrededor del cual gire el resto de las piezas.” Para la aparición de los MOOCs educativos los autores del informe dan gran relevancia a otro de los fenómenos que vivimos en la actualidad: el movimiento OPEN o modelo abierto. Contrapunto de una cultura dominada por la propiedad intelectual.
“El ámbito de la educación no queda a aparte de este proceso de evolución del concepto open y existen variaciones de este fenómeno especialmente adaptadas a este campo: open content, open educational resources, open education, …” Volviendo al segundo de los elementos, el de la evolución de los modelos pedagógicos, también encontramos con una variedad de experiencias que están conformando una nueva forma de aprender y que son ampliamente conocidas por el público en general: Gamificación, aprendizaje mediante la exploración, aprendizaje autorregulado, aprendizaje personalizado, microlearning y colaboración peer-to-peer. Quien más y quien menos todos, en el contexto actual de aprendizaje a lo largo de la vida todos hemos podido experimentar alguna de estas novedosas formas de aprender. Con todo lo anterior los autores de este informe afirman que se está generando un nuevo marco de referencia que tiene el potencial de cambiar algunos pilares sobre los que se asienta el sistema educativo actual, aunque si bien no nos lleve a un cambio estructural ya que la inercia del sistema actual es lo suficientemente poderosa como para condicionar la evolución del mismo.
“Serán más disruptivos los cambios que se generen desde posiciones paralelas a las actuales y en la medida en que logren alcanzar un éxito suficiente podrán desplazar o no a los modelos actuales,…, se observa como los MOOCs son un elemento importante en varias de ellas”. Estos son los modelos alternativos que se están generando: - Del consumo de conocimiento a la creación de conocimiento. - Optimización del tiempo de contacto con el profesor. - Aprendizaje adaptativo personalizado. - Pedagogía basada en la evidencia. - Deconstrucción del proceso educativo. - Diversificación de las certificaciones.
Los MOOCs van mucho más allá de una formación on-line, frente a esta aquéllos son gratuitos, avalados por prestigiosas instituciones educativas o expertos en la materia y gracias a las plataformas electrónicas pueden llegar a 100.000 alumnos por curso. Con dos enfoques diferenciados, por una parte tenemos a los conectivistas “en los que el alumno a través de su participación y generación de contenido es a la vez parte del aprendizaje del resto de alumnos. Por otro lado, aparecen los no conectivistas, en los que el desarrollo del curso es más parecido a un curso tradicional y la interacción con el resto queda en un segundo plano”. En cuanto a las áreas de conocimiento tratadas los cursos se encuentran más enfocados en aquéllas disciplinas que se encuentran en constante evolución, como la ciencia y la tecnología, las ciencias sociales y las ciencias aplicadas. El informe también se detiene a analizar cómo son sus interacciones con el sistema educativo tradicional, pero como se puede deducir de lo que hemos ido planteando desde el inicio, a pesar de que se han generado determinadas sinergias hay un campo de exploración muy amplio aún por delante. Así mismo deberán sortearse diversos handicaps en nuestro contexto local como el papel fundamental que las titulaciones juegan en nuestro sistema educativo. Para aquellas personas que trabajen en entornos educativos – formativos especial relevancia adquieren los tres escenarios de futuro que los autores de este informe plantean sobre los MOOCs.
Pues como bien se afirma “es una modalidad todavía en su infancia, y que en estos primeros años de andadura se ha dedicado principalmente a reproducir los modelos tradicionales, traduciendo los contenidos al formato digital y utilizando Internet como plataforma de distribución. Al igual que ha sucedido con otras tendencias, durante los próximos años los MOOC irán redefiniendo su formato, su papel, su relación con los sistemas legacy: en defiitiva, su lugar en el mundo de la educación y su forma de operar".