Revista Salud y Bienestar

Los signos de la depresión posparto: cómo reconocer la depresión después de que el bebé llega

Por Saludconsultas @SaludConsultas

¿Está simplemente abrumado por las demandas de la nueva maternidad o podría estar sufriendo de depresión posparto?

Las experiencias posparto de las nuevas madres raramente coinciden con la bonita imagen de flotar en una proverbial "nube rosada" que encontrarás retratada en algunas revistas femeninas. Físicamente dolorida después del parto, ocupada cambiando maxi almohadillas y pañales, privada de sueño, robada de interacciones inteligentes de adultos y preguntándose cómo dejar de llorar ya. Entre el 50 y 70 por ciento de las mujeres posparto experimentará lo que se conoce como el bebé azul.

Este fenómeno podría describirse como una "mini depresión". Tiende a fijarse en tres o cuatro días después del nacimiento del bebé y se caracteriza por llanto materno, fatiga, insomnio, incapacidad para concentrarse, sentimientos generales de estar abrumado por la maternidad y preocupaciones por el futuro. Estos "Bebes azules" son completamente normales y no requieren tratamiento más allá de un buen abrazo, un oído que escucha y alguien que puede limpiar la casa y lavar la ropa. Se van de nuevo dentro de unas dos semanas, ya que las nuevas madres se adaptan a la vida con el nuevo bebé.

En caso de que usted o alguien del que usted se preocupa, todavía esta deprimida después de dos semanas, y si los síntomas son significativamente más graves, puede ser que se pregunte si podría estar tratando con plena depresión postparto.

Signos y diagnóstico de la depresión posparto

La quinta versión del Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, el DSM-5, no distingue entre la depresión durante y después del embarazo por más tiempo. Aunque la depresión posparto no es actualmente una categoría oficial de diagnóstico, la mayoría de los proveedores de servicios de salud continúan utilizando el término para referirse a la depresión que comienza dentro de los 12 meses del parto, siendo los criterios diagnósticos iguales a los de la depresión clínica en cualquier otro punto en la vida.

Los síntomas de la depresión posparto son:
  • Un estado de ánimo deprimido (sentirse triste, desesperanzada, desamparada, vacía, inútil) durante la mayor parte del día casi todos los días, ya sea según lo informado por la madre afectada o por los que la rodean.
  • Pérdida de disfrute o interés en todas o en la mayoría de las actividades.
  • Pérdida del apetito o pérdida espontánea de peso rápida.
  • Siendo incapaz de dormir (aparte de causado por el bebé que está despierto ) o por otra parte que dormir excesivamente .
  • Sentimientos persistentes de culpa e inutilidad .
  • Una falta de concentración.
  • Estar plagado de pensamientos sobre la muerte. Esto puede pero no necesariamente tiene que incluir planes reales para cometer suicidio y las madres con depresión posparto también pueden sufrir de pensamientos recurrentes de dañar a su bebé o su bebé siendo dañado por otros.

La investigación sugiere que entre el 10 y el 20 por ciento de las nuevas madres sufrirán de depresión posparto o ansiedad.

Aunque los criterios diagnósticos no difieren de los de otros tipos de depresión, se cree que las causas de la depresión posparto (que no se comprenden bien en este momento) incluyen el cambio hormonal y la naturaleza singularmente difícil de cuidar de un nuevo bebé.

Factores de riesgo de depresión posparto

Un importante estudio sueco encontró que las mujeres con una historia de depresión mayor son más propensas a ser víctimas de la depresión posparto que otras. Entre las mujeres con antecedentes de depresión, la diabetes pregestacional y la entrega incluso un poco temprano se encontraron factores de riesgo para la depresión posparto.

Curiosamente, las nuevas madres que tenían más de 35 años cuando dieron a luz y las que sufrieron de diabetes gestacional durante sus embarazos, también se encontró en un mayor riesgo de desarrollar depresión posparto, incluso sin antecedentes de depresión. Se consideró que las madres jóvenes, las que habían tenido cesáreas o las que se les habían proporcionado con fórceps o extracción por vacío, y aquellas cuyos bebés nacieron temprano tenían tasas más altas de depresión posparto sólo cuando no tenían experiencia con depresión.

Tratamiento de depresión postparto

Si usted o alguien a quien usted ama se ve afectada por la depresión posparto, es importante reconocer que, aunque es improbable que los síntomas desaparezcan por sí solos, hay ayuda disponible.

La depresión posparto, al igual que otras formas de depresión, puede variar de leve a grave y el tratamiento debe adaptarse a las necesidades específicas del individuo.

No importa el grado de la depresión, la terapia es siempre un componente recomendado. La terapia interpersonal (TIP) y la terapia cognitivo-conductual (TCC) han demostrado ser útiles, siendo la TCC la mejor opción en las mujeres cuya depresión posparto incluye una gran cantidad de ansiedad.

La investigación muestra que los médicos son más reacios a prescribir antidepresivos a las mujeres con depresión posparto que a las personas afectadas por otras formas de depresión, algo que podría atribuirse en parte al hecho de que no se han aprobado antidepresivos como agentes de categoría A en las madres lactantes. Cuando los síntomas de la depresión son lo suficientemente graves que la terapia por sí sola no ayuda lo suficiente, las madres posparto requieren medicamentos para mejorar. El uso de antidepresivos durante 6 a 12 meses ofrece la mejor oportunidad de una recuperación completa.

Participar en grupos de apoyo para las mujeres con depresión posparto también puede ser beneficioso y como se cree que los cambios hormonales se encuentran entre las causas subyacentes, algunos datos sugieren que el tratamiento con progesterona puede ser útil. Sin embargo, esto no es concluyente en este punto, por lo que la terapia con progesterona puede considerarse un tratamiento experimental.

Aquellos que son activamente suicidas o tienen pensamientos recurrentes de perjudicar a sus bebés se les aconseja someterse a tratamiento de hospitalización para la depresión postparto severa. En la mayoría de los casos, eso no será necesario y la terapia, asistiendo a un grupo de apoyo cuando se desee, el aumento del apoyo social para satisfacer las demandas de la maternidad, y cuando sea necesario tratamiento antidepresivo será suficiente para ayudar a una madre a superar su depresión y seguir adelante con su vida.


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