Un estudio desarrollado por expertos de la Universidad de Bari (Italia), determina que los suplementos probióticos pueden prevenir los cólicos de bebés, los resultados apuntan a que una cepa concreta del Lactobacillus Reuteri Protectis reduce el número de regurgitaciones, el estreñimiento y además los bebés lloran la mitad de tiempo que los bebés que no recibieron el suplemento probiótico. Según varios estudios realizados, cuatro de cada diez niños alimentados con leche de fórmula o lactancia materna, han sufrido cólicos en alguna ocasión durante los primeros seis meses de vida.
Los cólicos empeoran la calidad de vida de los bebés, provocan alteraciones en el sueño y afectan a toda la familia en general, para algunos padres es una sensación frustrante y estresante. Muchos estudios han demostrado que el Lactobacillus Reuteri es eficaz para reducir los cólicos y los llantos, pero en esta ocasión se ha realizado un estudio específico en el que se ha suministrado a un grupo de bebés un suplemento oral con la cepa del Lactobacillus reuteri DSM 17938 (L. reuteri Protectis).
Se pretendía determinar qué efectos tenía esta cepa en la aparición de cólicos, reflujo gastroesofágico y estreñimiento en los bebés nacidos a término. También se pretendía determinar si los suplementos podrían reducir el gasto económico en las familias. En el estudio participaron 589 lactantes, se formaron dos grupos de bebés elegidos al azar, al primer grupo se le administró un placebo y al segundo un suplemento oral probiótico, durante un periodo de tres meses.
Para los expertos los resultados evidencian los beneficios de la cepa probiótica que hemos descrito, pero además, en el estudio paralelo se puedo constatar que el suplemento produjo un ahorro económico de 88 euros por familia, hablando de costes sanitarios ocasionados por los cólicos. Aunque lo más destacado son los beneficios saludables y calidad de vida, el mayor descanso para el bebé y para sus padres.
Como decíamos, se han realizado muchos estudios sobre el Lactobacillus Reuteri, pero este es el primer estudio que se ha desarrollado con la cepa específica del L. reuteri Protectis DSM 17938. Buscando en la red podemos encontrar otros estudios con características similares aunque con niños de 1 a 6 años de edad, durante seis meses se les administró el suplemento con la cepa de probiótico específica y se determinó que reducía significativamente el riesgo de diarrea, por lo que la conclusión es que se trata de un elemento que se puede utilizar desde el nacimiento ofreciendo resultados muy positivos.
A través de este artículo publicado en JAMA Pediatrics podréis conocer más detalles sobre la investigación y los resultados obtenidos.
Foto | Titlap
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Los suplementos probióticos pueden prevenir los cólicos de bebés