Es para mi todo un lujo dar paso al artículo que, no sin dificultades motivadas por la falta de tiempo, ha escrito Willy Bistuer. Willy es una de las personas con un curriculum más extenso en esto del fútbol americano en España. Actual head coach de los Barcelona Bufals y coordinador ofensivo de los cadetes de la Selecció Catalana, además de autor de Football Speech y sus mundialmente famosos podcasts. Sus opiniones y análisis acostumbran a ir un paso por delante y su conocimiento de lo que es la esencia, no sólo de la NFL sino también de la NCAA y la LNFA, extraordinario. Así que recomiendo la lectura de su pronóstico con el mismo interés con el que yo he recibido su opinión. Moltes gràcies Willy!.
Los tres candidatos
Antes que nada quiero agradecer la oportunidad que me ha dado Jordi para "hablar" con sus lectores y participar en su estupendo blog con un artículo en el que me deja soltar mis tonterías. Me pidió que pronosticara quienes son los tres candidatos a la próxima Super Bowl, así que, sin más dilación, vamos a ello.
En primer lugar, mi candidato número uno son los Green Bay Packers. Los actuales campeones tienen un núcleo muy sólido a ambos lados del balón que retorna prácticamente intacto. Es una masa jóven que conserva el hambre de victorias y títulos. Pero aún más importante, un grupo de jugadores que, desde mi punto de vista, sigue creyendo que no recibe todo el respeto que merece. Y todos sabemos que no existe motivador más grande que ese.
Aaron Rodgers se destapó la temporada pasada como el tipo de jugador que muchos ya sabíamos que era, esto es, un quarterback de élite. Y con una OL que le concede tanto tiempo y protección, resta importancia quienes sean los receptores o los corredores. Si a eso le sumamos que sus objetivos incluyen nombres de la calidad de Greg Jennings o Donald Driver, pues hombre, ayuda. El juego de carrera sigue generando algunas dudas pero mientras funcione el passing game, esas dudas quedarán minimizadas. A poco que, tanto John Kuhn como Ryan Grant o James Starks puedan cumplir eficientemente -lo que no significa que sean estrellas de la liga, sólo cumplir-, la ofensiva no tiene de que preocuparse. Y me gustaría ver cómo el novato Alex Green se añade a la mezcla; hablamos de un back bastante físico quien además proviene de un sistema (Hawai) orientado claramente al pase, por lo que creo que puede aportar también trazos como receptor.
En defensa, el giro dado a la unidad por Dom Capers es notorio aunque he de reconocer, entonando el mea culpa, que nunca creí en el éxito de la conversión a la 3-4. Capers, con la aportación de hombres como el entrenador de linebackers, Kevin Greene, ha conseguido crear una unidad agresiva y presionante que poco tiene que envidiar a aquella de la que toma ejemplo, la Blitzburgh de los Steelers. Hombres como B.J. Raji, Clay Matthews o Nick Collins, seguirán aportando su playmaking ability a una defensa que tiene tanto valor como unidad, no sólo por parar al rival, sino porque además es capaz de generar puntos por sí sola, algo que muy pocas consiguen. Otro punto a tener en cuenta es ver cómo el equipo podrá reemplazar el papel de los tres linebackers cortados por el equipo: Nick Barnett, Brady Poppinga y Brandon Chillar; sin ningún tipo de duda podríamos asegurar que entre ellos no estaba ninguna estrella de la NFL, pero todos ellos cumplían una función muy específica en este esquema.
Mi segundo candidato a la Super Bowl son los New England Patriots. El motivo por el que no les he puesto en primer lugar es porque me generan bastantes dudas. Pero del mismo modo no puedo descartar nunca a un equipo dirigido por Bill Belichick y comandado por Tom Brady. Creo simplemente que con la de cosas que esos dos hombres nos han demostrado ya, sería de necios hacerlo.
La offseason de New England ha quedado ensombrecida por dos nombres: Ocho Cinco y Albert Haynesworth. Yo soy de los que creo que BB puede obrar el milagro (y van...), reconvirtiéndolos a la causa. De ser así, no olvidemos que estamos hablando de dos grandes jugadores cuyo prime time ya ha pasado, pero siguen teniendo cosas que aportar. En ataque todo sigue más o menos igual. Brady sigue siendo un genio. Si la OL le proteje, podrá hacer lo que le de la gana. Y si finalmente 85 se acopla al juego ofensivo, miedo me dan él y Wes Welker, además de un Aaron Hernandez quien, día a día, se muestra más como el all purpouse playmaker que era en Florida. El juego de carrera, como viene siendo habitual en los últimos años, es el apartado ofensivo que más dudas genera aunque, la temporada pasada, BB consiguió resultados nada desdeñables con la suma de nombres en el backfield (Danny Woodhead, BenJarvus Green-Ellis, Kevin Faulk), a los que se añade el novato Shane Vereen y a los que quizá faltaría un claro número #1.
En la defensa es donde encontraremos los mayores cambios, pasando New England de una 3-4 a una 4-3. La llegada de Albert Haynesworth, si sano, convierte a los Pats en uno de los equipos con una de las DL's más temibles de la liga; por lo menos en el interior, gracias a la pareja Haynesworth - Wilfork. La unidad de linebackers es la que genera más dudas. Jerod Mayo es uno de sus puntales pero tras él, ¿quién?. Aunque sigo creyendo que, como viene siendo habitual, BB se sacará algo de la chistera.
El tercer y último de mis candidatos es... ninguno. Me explico. Veo a los favoritos citados anteriormente uno, dos, tres y cuatro pasos por delante del resto. Y mi "tercer candidato" es un grupo del que, a día de hoy, no destaca ningún líder claro. New Orleans Saints se debe tener en cuenta mientras tenga a Drew Brees aunque en defensa sean un coladero. Los Atlanta Falcons tienen en Matt Ryan a un joven quarterback con hambre, que mejora, día a día y con el nuevo "juguete" que le han traído -Julio Jones-, quién sabe. Cleveland Browns y Detroit Lions son dos equipos que, pese a tener la etiqueta de perdedores desde hace muchos años, están empezando a hacer las cosas bien. No se puede descartar a los Minnesota Vikings con la dupla McNabb - Peterson. Philadelphia Eagles, con el llamado "Dream Team", no han demostrado mucho pero ahí están los nombres y sus calidades. Baltimore Ravens y Pittsburgh Steelers siguen siendo dos durísimas rocas para cualquier rival y la suerte de los Arizona Cardinals dependerá de cómo se adapte Kevin Kolb, que yo creo que bien. Incluso los Tennessee Titans, si consiguen hacer volver a Chris Johnson, son un equipo que no debe tomarse a la ligera.
Sin duda, nos espera una temporada apasionante. Pero ... ¿no es siempre así?.