Revista Cine

Lost in Translation, de Sofia Coppola

Publicado el 07 octubre 2014 por Meg @CazaEstrellas

"Mientras más sabes quién eres y lo que quieres menos permites que las cosas te alteren."
 Lost in Translation, de Sofia Coppola.
A veces nos cruzamos de forma inesperada con personas que nos hacen replantearnos  muchas cosas, personas con las que no esperas tener demasiado en común, y cuando te quieres dar cuenta son imprescindibles en tu vida.
"Lost in Translation" (2.003) es una de mis películas favoritas en la historia del cine. Es una película de culto, nada comercial, motivo por el cual, pese a los reconocimientos en forma de premios y buenas críticas, tiene muchos detractores.
Bob Harris (Bill Murray) es un actor norteamericano venido a menos que viaja a Tokio para hacer un anuncio de Whisky japonés. Por su parte, Charlotte (Scarlett Johansson) es una joven casada con un fotógrafo al que acompaña a Tokio a hacer un reportaje. Bob y Charlotte se conocen casualmente en el bar del hotel donde se alojan y entre ellos surge una amistad profunda e inesperada. Lost in Translation, de Sofia Coppola. Bob y Charlotte a priori no tienen nada que ver el uno con el otro: pertenecen a diferentes generaciones, llevan vidas distintas, proceden de mundos desiguales, pero cuando se conocen surge la química entre ellos sin casi darse cuenta, y es que ambos se encuentran perdidos, no por hallarse a miles de kilómetros de casa, ni por estar en un país y cultura tan diferente a la propia, sino porque se dan cuenta del vacío que reina en sus vidas. Sus respectivos matrimonios no han resultado ser lo que esperaban, y hace ya tiempo que los dos se dejan llevar por la rutina en la sucesión de los días.
No acontece nada extraordinario aquí, estamos ante una comedia dramática en la que espectador encontrará secuencias protagonizadas por el silencio,  diálogos pausados, creíbles, sencillos, pero no hay que dejarse llevar por las apariencias, hay mucho más plasmado de forma intangible, expresado en forma de miradas, complicidad, una canción de karaoke intencionada, pequeños gestos prácticamente imperceptibles que hacen que que el espectador sea testigo de cómo dos personas perdidas se encuentran.Un arrollador, divertido e irónico Bill Murray que me cautivó desde el primer minuto. Una Scarlett Johansson a la altura. Maravillosa fotografía, planos, banda sonora. Un final inolvidable. Nada de azúcar, nada de buscar la lágrima fácil. Por más palabras que escriba, tengo la sensación de que soy incapaz de transmitir lo que esta película significa para mí. Ineludible. Profunda. Divertida. Emocionante. Imprescindible.
"Estoy perdida. ¿Eso tiene arreglo?"
Lost in Translation, de Sofia Coppola.


Volver a la Portada de Logo Paperblog

Revistas