Love & Mercy: un homenaje a Brian Wilson

Love & Mercy nos cuenta la historia que hay detrás del grupo de música californiano The Beach Boys, es decir, la historia de Brian Wilson, cofundador, compositor y cabeza pensante de la banda. El título hace referencia a la primera canción del disco Brian Wilson (1988), primer disco en solitario de Wilson y al que veremos cantarla al piano en los títulos de créditos.

La acción se sitúa en dos planos temporales diferentes: por un lado vamos a ver los momentos clave de la banda y las relaciones personales de todos los miembros de The Beach Boys. Seremos testigos, por ejemplo, de la sesión fotográfica para el disco Surfer Girl (1963) y veremos cómo la publicación del Rubber Soul (1965) de Los Beatles lo cambiaría todo para Brian Wilson (interpretado en su época de juventud por Paul Dano), que decidió concebir la creación del nuevo disco como un todo y no como una serie de singles intercalados con versiones y canciones de relleno. El arduo proceso de composición y de grabación del disco que sería el Pet Sounds (1966) con músicos profesionales en un estudio de Los Ángeles es uno de los momentos estrella de la película y quizá, por sí solo, podría sustentar la existencia de este biopic.

Pero paralelamente vamos a ver a un Brian Wilson adulto y psicótico en los años 80 (interpretado magistralmente por John Cusack) cuando conoce a una vendedora de coches, Melinda Ledbetter (Elizabeth Banks). La relación que se establece entre ellos y la particular prisión que sufre Brian Wilson por parte de su estricto terapeuta, el doctor Eugene Landy (Paul Giamatti) será el contrapunto más duro y doloroso de las canciones alegres del grupo californiano.

El biopic ha sido dirigido por Bill Pohlad, que habitualmente ejerce su papel como productor (12 años de esclavitud, Hacia rutas salvajes o Brokeback Mountain, etc.). La complejidad de llevar a la pantalla el personaje de Brian Wilson ha requerido de la coordinación de Cusack y Dano en una doble interpretación que probablemente les valga un Oscar (¿ex aequo?).

Toda la película es un homenaje a la figura de Brian Wilson y a un grupo, The Beach Boys, que muchas veces ha sido considerado menor por el público e identificado siempre con el sonido surfero que solo tenían en su primera etapa. Tanto para los fans acérrimos como para los no iniciados la película es un goce audiovisual, sobre todo cuando intenta mostrarnos el momento del ingenio creativo de Wilson y cómo consigue trasladar la música que suena en su cabeza a la realidad.

Pero los amantes del cine y de la música están de enhorabuena y deben estar preparados para lo que se viene, puesto que esto solo es el principio, ya que pronto veremos películas sobre la vida de Elton John, Freddie Mercury, James Brown, Elvis Presley, Janis Joplin, Nina Simone o Amy Winehouse, entre otros. Ojalá todas sean igual de interesantes que Love & Mercy.