Tengo que reconocer que leer lo de Synth-Pop en la critica de un disco, es todo un aliciente para mi, y siempre me incita a buscarlo como un loco por la red. Supongo que el hecho de haberme pasado toda mi infancia con grupos como The Human League, Soft Cell o Depeche Mode de fondo, tiene mucho que ver. Desde luego, las etiquetas siempre terminan abarcando un montón de grupos bastante diferentes entre si, y eso no cambia con los años, así que como os podéis imaginar, estas tres chicas de Portland poco tienen que ver con esas bandas que yo escuchaba de pequeño. Eso si, por alguna razón que desconozco, en todos los artículos que he leído de ellas, siempre mencionan la dichosa etiqueta…Incluso yo mismo lo estoy haciendo ahora!!!
La música de Lovers es más oscura, tranquila y salvo alguna que otra canción – Boxer, Figure 8 o To Be a Dancer (I Am Alive) -, no es apta para las pistas de baile. Al igual que en su anterior álbum, el estupendo I Am The West, en este Dark Light, se mueven entre la indietronica más calmada (esas baterias me recuerdan mucho a The Postal Service), y la oscuridad de grupos como Cocteau Twins. Digamos que sus canciones podrían ser la banda sonora perfecta para la escena triste de una película de John Hughes. Todo gracias a la melancólica voz de Carolyn Berk, que siempre esta en un primer plano y que hace que canciones como No Regrets o Don’t You Want It, sean difíciles de olvidar, aunque solo sea por unas horas.
7, 5