Revista Recetas

Lubina abierta al horno

Por Marisma

Ahora este tipo de pescados resultan asequibles al ser de piscifactoría. Viene costando dos euros con cincuenta la pieza más o menos, aunque ahora empezarán a subir en estos días, supongo. Unas veces le pido al pescadero que me las deje tal cual solo limpias de tripas y otras como esta vez le digo que me las abra. La ventaja es que se hace en menos tiempo porque al estar abiertas se hacen en un periquete, si las dejas demasiado se secarán. Así cocinadas tenemos el máximo sabor con el mínimo de grasas, muy bueno para estos días venideros de excesos calóricos.

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Hoy he preparado el plato para dos personas, para que os hagáis una idea.

INGREDIENTES

-dos lubinas abiertas y limpias de tripas

-una patata mediana por persona

-una cebolla mediana

-vino blanco

-perejil picado

-aceite de oliva y sal

PREPARACIÓN

Lo primero lavamos bien bajo el grifo las lubinas y las reservamos en un plato. Estas son las lubinas abiertas.

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Pelamos las patatas y las cortamos a rodajas lo más finas que podamos, lo ideal es con una mandolina. Ahora encendemos el horno a 190º calor arriba y abajo para que se vaya calentando. En la bandeja del horno ponemos dos cucharadas soperas de aceite y extendemos bien. Colocamos las rodajas de patata extendida y la cebolla cortada en juliana fina.  Ponemos otro chorrito de aceite por encima como dos cucharadas y sal. Llevamos al horno unos diez minutos. Al cabo de este tiempo las movemos con una espátula.

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Echamos un chorrito de vino blanco, como tres cucharadas soperas o así, no más y medio vaso de agua. Movemos con cuidado de nuevo con la espátula. Ahora ponemos sal a las lubinas por los dos lados y las colocamos encima de la cama de patata y cebolla que ya tenemos a medio hacer.

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Ponemos un hilo de aceite por encima del pescado pero no mucho. Metemos de nuevo la bandeja en el horno y lo tendremos otros diez  minutos, como mucho quince. Al estar el horno ya caliente se asarán enseguida y tampoco interesa que se sequen. Espolvoreamos con perejil al final de la cocción.

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Servimos entera con un montoncito de patata y cebolla a un lado. Acompañaremos con ensalada.

Bien sano y rico, y bien de precio.


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