LXIV Carrera Urbana Feria de Nerja

Dos semanas estuve parado entre que llegué de Santander y me hice la analítica (a los dos días) hasta que llegaron los resultados, para mi alivio todo dentro de los valores normales.Me quitó un peso de encima, permitiéndome volver a correr, algo que ya me apetecía desde hacía varios días, pero no quería hacer hasta asegurarme de que todo estaba bien.Había perdido bastante fondo, pero me encontraba fuerte, cómodo rodando a ritmos en torno a 4:20-30 en salidas de una hora y sorprendiéndome con series cómodas a 3:20-3:30 el kilómetro recuperando dos minutos.Tenía ganas de correr rápido, así que aprovechando que una de las pruebas más veteranas de Andalucía volvería a tomar lugar, decidí apuntarme.Apenas llevaba dos semanas entrenando desde el parón y no es una distancia que esté entrenando de forma específica, pero Julio, que desde hace ya algo más de un año me lleva la preparación, confiaba en que podría mejorar la marca de 35:18, de la Carrera Popular 10 km Villa de Mijas de 2018, que realicé con huaraches.Esta vez no podría correr con algo más diferente, ya que, tras estrenarlas en una tirada de series hacía un par de días, competiría con las Nike ZoomX Vaporfly Next% Gyakusou, que tras mucho tiempo queriendo probar, encontré a mitad de precio en la propia web de Nike.Salí temprano con Mayte, aparcamos al lado de los apartamentos Las Rosas, recogimos el dorsal y tras dejar las cosas de nuevo en la furgo, nos dirigimos al Estadio de Atletismo Enrique López Cuenca, donde me encontré con mi tocayo Juan, del Vélez, y varios compañeros de su club con quien hacía bastante que no coincidía.
También me encontré con Agustín Molina, que correría la prueba de 5 kilómetros con su grupo de atletas sub 18, distancia en la que Mayte, tras poco más de un mes entrenando un par de días en semana, debutaría por primera vez.
Tras pasar por el baño bajamos a la pista, donde nos encontramos con tres compañeros del Club Atletismo Fuengirola, Julio Pérez, Miguel Ángel Matilla y Fernando Muñoz, con quienes charlamos un rato antes de dar una vuelta de calentamiento a la pista y colocarnos en línea de salida.
No me posicioné mal, pero tuve la mala fortuna de que se me metió en una de las zapatillas un trozo de caucho de la pista de atletismo y tuve que salir al césped para quitármela, por lo que perdí posiciones.Aun así esperaba que los corredores que tenía delante fuesen de la carrera de 5 kilómetros y fuesen a ir rápido, pero me sorprendió que, tras el pistoletazo de salida, se fueron quedando y tuve que ir zigzagueando hasta que salimos del estadio.Alcancé a Agustín y su grupo antes de girar en la rotonda y en la bajada por la Avenida Ciudad de Pescia me coloqué a una docena de metros tras el grupo de cabeza, que poco a poco se comenzaba a distanciar.Pasé el primer kilómetro en 3:06, un ritmo que incluso en series de un kilómetro pocas veces en marcado, pero imaginaba que sería por la inercia de la bajada.Recordaba que Julio me había dicho que intentase rondar 3:30 minutos el kilómetro, pero, conocedor de que la vuelta sería en subida al haber corrido ya la prueba (aunque con otro trazado) y viendo que de momento, me encontraba cómodo, continué lanzado hacia la costa.Nos habíamos agrupado tres corredores y al menos uno de ellos corría con zapatillas con placa de carbono, ya que la mía sonaba, pero la suya, por momentos, parecía un balón de baloncesto botando.Me sorprendí al pasar el segundo kilómetro en 3:02, ya que seguía encontrándome cómodo y es verdad que habíamos tenido una bajada larga y buena, pero no es un ritmo que esté acostumbrado a ver ni en series de más de 400 metros.El siguiente kilómetro tendría algo más de callejeo, algunos giros y algún pequeño repecho.Nos separamos ya de la prueba de 5 kilómetros y continuamos los tres corredores, identificando en uno de los giros, en el que me adelantó, a Ángel Accino, con gorra blanca; al otro corredor no lo conocía.El tercer kilómetro cayó en 3:26 y el cuarto, de nuevo con pendiente a favor, ya que nos llevó de la Avenida Castilla Pérez a la Calle Antonio Ferrandis, en 3:12, pero desde aquí ya la cosa no iría a mejor.Iba ya bastante cansado y aun no habíamos pasado el ecuador de la prueba, por lo que estaba claro que el ritmo criminal de los primeros kilómetros me estaba pasando factura, pero decidí agarrarme al grupo todo lo que pudiese.En la bajada del Parque Verano Azul a la Playa el Playazo me coloqué en la cola, aprovechando la pendiente a favor para recuperar el aliento y marcando el quinto kilómetro en 3:28.Completé el ecuador de la prueba en 16:12, superando en casi un minuto mi mejor marca en la distancia, también de 2018, en la II Carrera Nocturna Solidaria Corre por la Igualdad, de Los Barrios.Cuando llegamos a la tierra me sorprendí a mi mismo tirando momentáneamente del grupo, corriendo por la parte derecha, que no estaba tan mojada, pero fui perdiendo fuelle y salí cerrando el grupo, tras coger un botellín del avituallamiento del kilómetro 6, que pasé en 3:35.Bebí un trago y me eché el resto por encima, pero tuve la mala suerte de atragantare y se me quedó una molesta carraspera que me acompañaría ya hasta la meta.Ascendimos a la Nacional 340 y emprendimos camino al estadio, con una pendiente progresivamente más inclinada y un viento que esperaba que ayudase desde la cola, pero que brillaba por su ausencia pese al vendaval que soplaba en la playa.El séptimo kilómetro cayó en 3:37, pero ya iba descolgado del grupo y sufriendo como no recordaba en mucho tiempo.Además, escuchaba pasos por detrás, aun distantes pero avanzando con firmeza y sabía que tarde o temprano me acabarían alcanzando.Lo hicieron dos kilómetros después, tras completar el octavo en 3:44 y el noveno en 3:47, a apenas doscientos metros de la rotonda de acceso al estadio, pero no tenía fuerzas para seguirle.Aprovechando la inercia de la última bajada me lancé hacia la meta, empujando con todo lo que me quedaba, marcando el último parcial en 3:37 y dejando la marca en 34:13, algo que no hubiese podido ni imaginar antes de la carrera.Llegué a meta en décima posición, quinta senior, mientras que Mayte había bajado de los 30 minutos en su debut en la distancia, con muy buenas sensaciones.Llevaba desde 2019 sin correr un 10k y esa última marca fue de 39:37, pero no se me ha quitado aun el gusanillo de correr rápido y repetiré en Estepona la próxima semana.Tengo que analizar el recorrido, porque creo que tiene también desnivel, pero intentaré hacer kilómetros más estables y a ver si soy capaz de mejorar de nuevo la marca.No se si se podrá repetir una actuación como la de hoy, pero al menos le pondremos ilusión y muchas ganas ;)