Si es que no sé no por dónde empezar, cuando llevas una semana bastante mala, saturada de más viento, más lluvia y más de todo cuesta escribir, escribir sin transmitir todo ese gris que ha decido pasar el invierno por aquí.Y ya que una imagen vale más que mil palabras, yo me despido y os dejo acompañados de mis macro y de Quevedo.
Es hielo abrasador, es fuego helado,
es herida que duele y no se siente,
es un soñado bien, un mal presente,es un breve descanso muy cansado.
Es un descuido que nos da cuidado,un cobarde con nombre de valiente,un andar solitario entre la gente,un amar solamente ser amado.
Es una libertad encarcelada,que dura hasta el postrero paroxismo;enfermedad que crece si es curada.