Portada tríptico de la muestra
Organizada por la Fundación Mª Cristina Masaveu Peterson y CentroCentro Cibeles de Cultura y Ciudadanía.
Desde el 29 de noviembre y hasta el 25 de mayo de 2014, se exhibe por primera vez una selección de las mejores obras maestras de los siglos XIII al XIX que atesora la Colección Masaveu, uno de los fondos artísticos privados más importantes de España.La muestra, que tiene lugar en el espacio cultural CentroCentro Cibeles del Ayuntamiento de Madrid, http://www.centrocentro.org representa una oportunidad única para contemplar algunas de las mejores piezas de la colección de ese periodo, que no han sido expuestas desde hace más de una generación.La exposición concentra un total de 64 piezas, entre pinturas y esculturas, datadas entre los siglos XIII y XIX, que por su variedad de formatos, heterogeneidad de procedencias y extraordinaria calidad, permite crear un auténtico museo de la imagen entre el Románico y la Ilustración. Se podrán admirar desde anónimos maestros medievales, hasta nombres del Barroco como Murillo, Zurbarán o Alonso Cano, así como El Bosco o El Greco, además de un selecto grupo de pinturas flamencas e italianas, de autores como Joos van Cleve el Viejo o Matthis Gerung.Dado el contexto social e ideológico de los siglos en las que fueron producidas, la mayoría de las obras tienen una temática de inspiración religiosa y espiritual. Ángel Aterido, comisario de la exposición, las ha ordenado en tres capítulos cronológicos: “De Madera y Oro”, “Entre el Gótico y el Renacimiento” y “El Triunfo del Lienzo”.
La exposición da continuidad a la serie “Mecenazgo al servicio del arte”, iniciada en este espacio cultural con el proyecto El legado Casa de Alba y la Colección Helga de Alvear. El arte del presente.En lo que a románico se refiere, dos obras maestras, una es una pequeña tablilla de marfil que preside la entrada a la exposición, de apenas 13 cm. de lado y datada en el siglo XII, representa con meticuloso detalle el momento del Descendimiento, con muy posible procedencia del taller de eboraria que en su día crearon los reyes Fernando I y Sancha en San Isidoro de León, en su momento debió de pertenecer a algún tipo de arqueta o pieza similar con escenas bíblicas y de la cual, el resto de piezas se dispersaron, parece que algunas de ellas están expuestas en El Hermitage de San Petersburgo y en el Metropolitan de Nueva York.La otra es un calvario castellano del Siglo XIII, con las tallas de Cristo crucificado (sin cruz), la Virgen Maria y San Juan. Ejemplo total del hieratismo de las figuras románicas y con un espectacular estado de conservación, hay que fijarse sobre todo en su policromía, tan difícil de encontrar en tallas de esta época.
En definitiva, muy recomendable muestra, no solo por los fondos románicos, también es muy interesante, y cómodo de ver en una sola exposición, la evolución de la pintura y la escultura de temática religiosa a lo largo de los siglos, además hasta el 25 de mayo tenéis tiempo para planificar vuestra visita con antelación.
El descendimiento
Anónimo leonés
(Relieve marfil (S.XII)
Descendimiento (detalle)
Descendimiento (detalle)
Calvario.
Anónimo castellano
(Talla en madera policromada. S.XIII)
Calvario (detalles)
Imagen de la exposición
(Imagen cedida por CentroCentro Cibeles)
(Copyright CentroCentro Cibeles)