LA MARCHA: INTRODUCCIÓN A LA ESPECIALIDAD ATLÉTICA.
La voluntad del que suscribe es la de abordar la Marcha Atlética desde el punto de vista de un exatleta participante en todos los grandes campeonatos internacionales de esta especialidad atlética, en la década de los 80, y actual entrenador de atletas en edad de promoción.
La idea sería la de tratar el tema en tres breves artículos:
- La marcha: La introducción a la especialidad atlética
- Detección de talentos
- El juzgamiento de la marcha.
Hablamos pues de una especialidad del atletismo que ha dado a este país gran parte de las medallas a nivel internacional y sólo por este motivo merece especial atención por los entrenadores de atletismo.En primer lugar decir que no es una especialidad complicada de trabajar, pero lo que si que hemos de tener en cuenta son una serie de premisas que la diferencian un poco del resto de especialidades del fondo.Un error, y no demasiado grave, es el de empezar a entrenar marchadores como fondistas, que si lo son, pero tendríamos de tener en cuenta otra serie de factores.
Empecemos pues a destacar los puntos coincidentes y diferencias entre un atleta que queremos introducir en la marcha y un atleta de fondo convencional. Estas coincidencias/diferencias van a modelar también las coincidencias/diferencias de los entrenamientos de un marchador y un fondista al uso.
A mi entender el marchador y el fondista coinciden en su disfrute de correr/marchar largas distancias y largos periodos de tiempo. Es complicado introducir en fondo o marcha a un chiquillo que te pone mala cara cuado en edad alevín o infantil le haces calentar dos vueltas a la pista. No es cuestión de descartarlo por completo, pero ya nos esta diciendo mucho de su capacidad de abordar física y mentalmente entrenamientos de carrera/marcha largos. Tiene que tener capacidad orgánica y mental para este tipo de entrenamientos. La fuerza de voluntad la va a necesitar para cualquier especialidad atlética: carreras, largas o cortas, saltos y lanzamientos.
Como diferencias destacaría que el marchador ha de poseer mayor nivel de fuerza en el tren superior, por la importancia del impulso de brazos. Es por lo que el marchador suele tener un peso ligeramente superior al fondista. En cuanto a la estatura, a mi entender, si tendría que ser algo más elevada que la del fondista, ya que al no existir la fase de vuelo la zancada es muy importante. Esto es la teoría, porque todos conocemos ejemplos de atletas entre los 165 y 170 centímetros con grandes resultados y registros.
La técnica y el reglamento: La técnica de marcha es tan importante como la técnica de carrera, pero con la premisa de un marchador puede ser descalificado si no se ajusta al reglamento. Por tanto tendrá que trabajar la técnica con mayor incidencia en el ajuste al reglamento sin dejar de lado la economía en el paso y desplazamiento.
Por lo demás los entrenamientos serán muy parecidos a los del fondista, variando al máximo para que sean atractivos y lo menos monótonos posible. Adecuándolos a la edad y distancia en la que compita el atleta, ya sean 5,10, 20 ó 50 km.
Por tanto hablaríamos de: Rodajes largos en pista forestal, fartlek natural con cambios de ritmo según nos marque el terreno en pista forestal, series de diferente distancia y recuperación en pista, intervals variando distancia y recuperación en pista y rodajes largos progresivos en asfalto. Sin olvidar las sesiones de Tècnica de marcha y los circuitos de fuerza de autocarga.
RicardPueyo MinistralEntrenador nacional de atletismoAtleta olímpico en Seúl 1988Medallista bronce Junior Atenas 1986
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