Y es que siempre me ha gustado mucho el té verde en general —la variedad sencha, por ejemplo, no falta nunca en casa— así que cuando fui a Japón sabía que iba a beber mucho té (no solo verde), y también "comer" mucho matcha. Porque en Japón hay una infinidad de dulces hechos con este ingrediente. Desde golosinas y helados de supermercado, hasta bollería y pastelitos de lo más delicados. Mi reto era probar un dulce con matcha diferente cada día. Eso sí, el helado de cucurucho lo tuve que repetir varias veces porque estaba riquísimo. ;)
Mis amigos ya me llamaban "The Matcha Monster", y casi me vuelvo de color verde... :)
¿Os gusta este tipo de té? A ver qué os parece la selección...
{Té matcha y wagashi en los jardines Hama Rikyu de Tokio}
{¡Hasta los helados del súper estaban ricos!}
{Bollito de matcha relleno de alubias azuki}
{El matcha latte, también se encuentra en Starbucks.}
{Galletas varias rellenas de matcha —del mercado Nishiki en Kioto}
{Otra delicia dulde del mercado de Nishiki en Kioto}
{El mejor helado artesanal de Kioto, en Gion Kinana}
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