Mensaje de luz

MENSAJE DE LUZ 
Sabes ya que cada uno de tus órganos vibra de un modo especifico, según la frecuencia del despertar que tu ser haya experimentado. Cada día te demuestra el grado de unión que tu nuevo yo va desarrollando con la tierra. Y no existe idea alguna que te haga desear ser algo mas, alguien mas, que lo que eres. Ante ti se abre la sabiduría con alas de resplandeciente mariposa, y nada hay que impida que vueles libremente por encima de todo aquello que hasta ayer tenia algo de importancia para ti. He aquí que tu nombre ahora se asemeja al tañer de  las campanas, y tu voz es parecida al sonido libre del agua en el manantial, porque al igual que él, fluyes libremente en un tiempo que no sabe de ayer ni de mañana. El despertar se ha manifestado porque ya no tienen importancia para tu ser ni los frutos de temor de tu mente educada en el miedo, ni las infructuosas obras de tu intelecto perdido en las formas, las usanzas y los deberes. Ahora eres libre, y esa libertad no conoce más limites que los que tu decidas imponer. Ahora el amor tiene sabor, olor, y color de tiempo nuevo. Y no necesita ni pide ni exige, posesión, nombre o compromiso. Los seres despiertos se manifiestan en libertad, porque ya los instintos primarios que hasta ayer gobernaban cada acto de la existencia, se han transformado en amigos, y no tiranos. Y por eso puedes amar sin poseer o sin ser poseído. Mira cuan hermosa es la gracia de amor en la que ahora vives, que puedes llamarte a ti mismo joya del tesoro, y al mismo tiempo cofre del tesoro, y guardián del tesoro que se regala libremente en bienaventuranza y paz. Ahora no necesitas pertenecer, porque ya nada te pertenece y todo te pertenece a la vez, eres abierta puerta de entrada de todo sentimiento, pero también de salida de toda emoción que pueda turbarte. Tu corazón ya no late ansioso ante la llegada del amado en egoísmo, sino que mas bien tranquilamente espera a quien debe llegar y despide a quien debe partir. Conoces la paz del ser y por eso amas como el ser, infinitamente, incondicionalmente, inconfundiblemente. Por eso sabes que quien ama, nunca deja de hacerlo…aunque existan eones de distancia entre el amante y el amado, porque te has realizado en el amor eterno, y sientes y sabes y sueñas y esperas solamente y en paz, el eterno retorno de ese amor que das, y que recibes minuto a minuto, instante a instante…¿Que puedes temer entonces?  Si confiado en el amor, sabes que transitas por el camino indivisible y eterno de la paz interior. Ahora no temes a la muerte, porque sabes que el amor es eterno, y tu eres fruto de ese amor, y eres semilla de ese amor, y árbol de ese amor, y también la sombra del árbol que ha cobijado ese amor. Y sabes que lo opuesto al amor no es el odio que ya no existe, sino la muerte a la cual aceptas solo como manifestación de la debilidad de tu propia voluntad…pero que ya no tiene cabida en tu mente, ni se esconde en ningún órgano, ni te aguarda en ningún camino. Porque tu eres amor eterno que ha vencido la muerte. Ven, que ahora te aguarda en tu ser toda la sabiduría que se alberga en la conciencia universal, toda pregunta tiene respuesta, y toda respuesta tiene claridad. Asi has vencido la ignorancia porque tu intelecto perecedero, se ha renovado en las aguas de la inmortalidad y ya no conoce motivos para dudar. Si sabes quien eres, y sabes a donde vas….si entiendes tu misión, y sabes del amor universal, si ya no temes morir, ni nacer…si no hay distancia entre tu ser y el Ser universal, si además te has unificado con cada mundo, y la historia de ese mundo y el amor que alienta en el, si ya hayas belleza en lo mas sencillo, y te transportas sin temor de mundo en mundo, de aliento en aliento de paz en paz…si ya puedes intuir en ti mismo la perfección obligatoria que es tu herencia y tu vida…entonces, has tocado  la universalidad…y tu entendimiento ya no necesita  de recuerdos de vidas anteriores o posteriores para comprender tu hoy…y por eso eres llama universal iridiscente que acompaña el camino de tus hermanos para que no conozcan el paso titubeante del ciego. Tienes un trabajo que hacer, pero es un trabajo de amor…y por eso está desprovisto de todo dolor y de toda angustia….es un trabajo de armonía interior y de paz externa…es el trabajo del manso guía que acompaña y sugiere, que no necesita ni busca el reconocimiento, y que es feliz solo con saber que esta haciendo aquello que ha venido a hacer….y que luego podrá descansar en la inmensidad del universo…. Ven, camina a mi lado, ni delante ni detrás de mi…no adores al Ser, mas bien vívelo, experiméntalo y amalo en toda su ilimitada belleza, pues el Ser y tú son uno y, amándolo, te amas y amas al universo que solo espera de ti una palabra para hacer cada sueño realidad y cada idea amorosa, poesía en movimiento y en esplendor. Ama y crece en el amor, pues solo así se renueva la vida de tu mundo y tu vida con el. Fuente: Canalizado desde Caracas, Venezuela para el Mundo por un canal que quiere permanecer en el anonimato