Como es costumbre todos sus puestos se han instalado a los pies de la Catedral,en la Plaza la Reina de la Ciudad de Valencia, respetando el espíritu de antaño. En el siglo XIIII-XIV, este mercado era el lugar donde los aprendices de este oficio exponían sus productos para demostrar su habilidad para ser admitidos en el Gremio alfarero. En aquella época, todo el material de cocina era de barro y los habitantes de los pueblos de alrededor de Valencia venían a comprar este tipo de artículos al mercado. Con el tiempo el mercado pasó a ser el lugar de compra de todo el material de cocina, ya que por aquellos tiempos eran todos de barro. Desde los pueblos de los alrededores de la ciudad acudían al mercado a la compra de este tipo de artículos.
De pequeño mis padres me regalaban la tradicional «campanita de la Virgen» y a ellos sus padres, esta es una tradición que pasa de padres a hijos,es uno de los productos más vendidos, está hecha de barro cocido y tiene el yugo pintado de rojo. Además, se sigue manteniendo hoy la tradición de que sean los padres quienes se la regalen a los hijos. Mis padres me decían que si tenía miedo por las noches o tenía algún problema, tocase la campanita y un Ángel vendría a ayudarme"cosas de los padres", Pero la verdad que de niño y viviendo en una alquería en la huerta ayudaba tener la campanita en la mesita. Así que si no lo conocéis vale la pena pasearse por sus tenderetes de cerámica y barro cocido, tan típicos, muchos de ellos para cocinar suculentos arroces al horno. Lleva en marcha desde la cristianización de la ciudad, por lo tanto tiene un gran arraigo este mercadillo en nuestra cultura.Patria valenciana es un Blog de actualidad y de opinión.
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